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María del Carmen Díaz: "Igual que prevenimos accidentes cerebrovasculares podemos proteger la reserva cognitiva"

La experta señala claves para proteger la salud de nuestro cerebro: el cultivo intelectual y seguir activo físicamente al envejecer

La psicóloga María del Carmen Díaz Mardomingo. // Santos Álvarez

¿Curaremos el Alzheimer y las demencias? La experta en Psicología María del Carmen Díaz está convencida de que si. "Confío mucho en la medicina, hemos tenido muchos avances", explica, "y creo que sucederá como con el cáncer, que hace años era mortal en muchos casos y ahora vemos que el porcentaje de tumores que se curan es cada vez más amplio. Lo que sucede es que en las demencias hay muchos factores que están incidiendo, factores de vulnerabilidad, predisponentes y circunstancias ambientales que tal vez desconocemos, eso hace que sea complicado encontrar una etiología, pero finalmente la medicina dará con las causas del Alzheimer; mientras tanto lo que debemos hacer es cuidar al enfermo, su entorno y las familias".

-¿Existen los olvidos normales en un envejecimiento sano?

-En el envejecimiento sano, cuando no hay problemas, es verdad que hay una vulnerabilidad sobre todo a padecer problemas de memoria episódica, que son esos acontecimientos que podemos concretar en una fecha y en un tiempo concreto, nos olvidamos de lo que hemos comido ayer o de si antes de comer vimos a una persona, tenemos fallos que llamamos de memoria episódica en el envejecimiento sano. También tenemos a veces fallos de otro tipo que llamamos el fenómeno de la punta de la lengua, es decir la dificultad para acceder al léxico, no nos salen las palabras adecuadas en un momento dado, pero no tiene mayor repercusión porque eso nos pasa a todas las edades solo que conforme vamos cumpliendo años ese fenómeno de la punta de la lengua sucede con más frecuencia. Esos serían los dos problemas que suceden con más frecuencia en un envejecimiento sano.

-¿Qué sucede cuando el deterioro se debe a una demencia?

-Cuando ya hay una demencia tipo Alzheimer vamos a ver síntomas más evidentes, esos fallos de memoria son más importantes, suceden con mucha frecuencia y además son olvidos con peso, no es lo mismo olvidar dónde he dejado las gafas, las llaves o dónde he aparcado a que olvide de ir a recoger a los nietos al colegio cuando lo hago frecuentemente o una cita médica que además me acaban de decir mis hijos que tengo que ir a continuación. Esos fallos de memoria episódica son evidentes en una fase de Alzheimer temprano y a veces es la primera manifestación. Otro de los fallos puede ser en forma de desorientación temporal y espacial, la persona puede sentirse desorientada en calles que son muy familiares y a lo mejor va a andando por un sitio y vemos que se equivoca de calle y coge por otro sitio, son síntomas y a veces la familia nos dice mi padre o mi marido salió a dar una vuelta como siempre pero está tardando más, y cuando vuelve luego a casa dice que ha estado dando un paseo y viendo escaparates y lo que sucede es que se ha perdido en sitios que para él son conocidos.

-¿Es clave el papel de la familia?

-Si, lo que sucede es que en muchos casos en esas primeras fases de demencia tipo Alzheimer el enfermo a veces niega los déficits, o los camufla o cree que no son tan importantes como para hacerlo manifiesto, pero claro, la familia es la que va tomando nota de todo eso, si fulanita ha fallado en tal cosa. En gente mayor que sigue trabajando también suele empezar con fallos en el trabajo, fallos a la hora de planificar, es también un síntoma muy importante de que esa persona tiene un deterioro cognitivo que igual ya es importante, por ejemplo que no realice las actividades en su lugar de trabajo con cierto orden, que no llegue a acabar todas las tareas, que le falten cosas por hacer o que los compañeros le digan que ha cometido muchos fallos, también no llegar a tiempo a las cosas porque hay fallos en la planificación de actividades. En una persona que está en su domicilio, por ejemplo en una ama de casa, podemos ver esas dificultades para planificarse, entonces dice hay que lío tengo, no se me organizar para hacer la paella de todos los días, esos fallos son signos de que algo no está bien.

-Destaca que a veces los enfermos delegan los trabajos

-Si, a veces lo hacen en esas primeras etapas, lo que hacen es delegar y decir por ejemplo mira, ya no tengo ganas de cocinar que bastante lo he hecho toda la vida. Eso una persona mayor lo puede hacer porque esté harta efectivamente (sonríe), ya estoy harta de cocinar para todos, pero también puede ser un fallo y que lo que suceda sea que no sabe cómo empezar, si coger primero el arroz o hacer el sofrito, en ocasiones eso puede estar camuflando un problema mayor.

-Un significativo porcentaje de personas mayores están solas y las cifras continúan aumentando ¿son más vulnerables?

-La soledad es un factor muy importante porque esas personas que están solas puede ser o bien porque lo han elegido o porque les ha tocado en la vida, se han quedado viudos, han ido desapareciendo los hijos etc, son distintas opciones. El que elige estar solo luego probablemente tendrá una vida rica porque tenga una red social de amigos, salga o invite gente a su domicilio, pero la persona que se queda sola y no quiere estarlo puede sufrir problemas importantes por ejemplo de comunicación, una persona mayor que no se comunica, deja de hablar, de salir y de relacionarse con los demás deja de estar estimulada cognitivamente y efectivamente la soledad puede hacer una persona vulnerable y ser un factor de riesgo añadido para que pueda padecer luego una enfermedad de Alzheimer y si la tiene no esté protegido contra ella.

-Insiste en que el aislamiento agrava al extremo el Alzheimer

-Lo que un enfermo de Alzheimer nunca debe hacer es aislarse, hay que potenciar al máximo esas capacidades que todavía tiene preservadas, porque un enfermo de Alzheimer va a ir perdiendo poco a poco los aspectos cognitivos, los comportamientos y la personalidad se van a ir alterando poco a poco y hay que seguir estimulando aquello que todavía puede hacer. Por lo tanto lo de ocultar al enfermo, lo de que no lo sepa la familia es un error gravísimo, porque si tu familia y vecinos saben que tienes esta enfermedad no les va a importar que nos equivoquemos y digamos que vivamos en el séptimo cuando vivimos en el cuarto, ese error lo vas a perdonar.

-¿Se puede prevenir el deterioro cognitivo?

-Es una cuestión interesante: lo que podemos intentar es llevar a cabo actividades y estilos de vida saludables. Igual que prevenimos accidentes cerebrovasculares y para ello nos dicen los médicos reduce tu consumo de alcohol, colesterol, intenta hacer una vida activa y haz ejercicio físico, también podemos proteger nuestra reserva cognitiva. Se sabe que la reserva cognitiva es un factor muy importante a la hora de poder presentar o no un deterioro cognitivo como sucede en las demencias, y esa reserva cognitiva se va enriqueciendo a través del cultivo a nivel intelectual, el que la persona siga aprendiendo a lo largo de su vida cuestiones motivantes. Se dice que aprender un idioma es importante, pues si pero si estás motivado para ello, aprende cosas que para ti sean significativas, el aprendizaje a lo largo de la vida puede prevenir que de mayor sufras una demencia. Y de todas formas, aunque no puedas parar la enfermedad si que tienes más estrategias para afrontarla. Otro aspecto es que la persona tiene que seguir activa físicamente, el ejercicio se ha demostrado que es un factor de protección importante de cara al deterioro cognitivo en mayores.

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