"En verano siempre se producen más abandonos, parece que estorban los perros cuando uno se va de vacaciones, cuando no debería ser así, y se abandonan, sobre todo los perros mayores". Son las palabras de Gloria Cubas, presidenta de Os Palleiros, la entidad que atiende el refugio de animales de Campañó, que se queja de que en esta época aumenta el índice de abandonos, especialmente de cachorros.
Relata que el pasado domingo, integrantes de Os Palleiros encontraron en un contenedor de basura ocho cachorros recién nacidos al borde del fallecimiento. Cinco días antes ocurrió algo similar con la diferencia de ser una caja de frutas y un saco de dormir lo que cubría el cuerpo de los animales. El fin de la temporada de caza y el verano son las fechas en las que más abandonos se producen y esto conlleva un gran trabajo para la protectora y sus voluntarios.
La protectora Os Palleiros tiene en sus manos en la actualidad al menos 155 perros a los que alimentar y cuidar, muchos de ellos con enfermedades crónicas e incurables, lo que supone un gran trabajo y una enorme cantidad de dinero que desembolsar. Cada día este número aumenta debido al abandono y a la falta de concienciación de los dueños que deciden desentenderse de su animal. De estos 155 perros, 30 son cachorros que aparecen en situaciones extremas, metidos en cajas de frutas, bolsas de basura o incluso contenedores.
Según la presidenta del colectivo, nunca habían tenido un verano como este en cuanto a abandonos de cachorros. Gloria Cubas se siente sorprendida con esta "deshumanización", que desborda la perrera, y su colectivo intenta cubrir las necesidades de todos los cachorros que acogen e insiste en que "todas estas actuaciones que lleva a cabo la protectora suponen un gran coste que difícilmente podemos soportar".
El Concello aporta 27.000 euros al año, cuantía que no cubre ni un tercio de los gastos que tiene la protectora a lo largo del año, que suma unos 90.000 euros que, gracias a voluntarios y donaciones, pueden conseguir.
La protectora cuenta con 30 voluntarios, que invierten su tiempo en ayudar a conservar las instalaciones y en el cuidado de los animales que allí habitan. Gracias a ellos y a las donaciones de particulares que recibe a diario la protectora, han podido mejorar su establecimiento, recientemente mejorado por el Concello. Limpiar, desinfectar, realizar los baños, pintar las paredes, son algunas de las necesidades que los voluntarios cubren en el centro, entre otras que desarrollan con los animales.
La protectora se suma a numerosas campañas, mercadillos y cenas benéficas para poder sostener el centro y los animales que habitan en él. La colaboración ciudadana es un gran apoyo para ellos, tanto económica como con materiales, vacunas, medicamentos, pienso... La próxima cena benéfica se celebrará el día 22 de julio en la Finca Batacos a las 22.00 horas.
