El club Free Bones Bikers al que pertenecía Blas Fernández Viñas es el organizador de la undécima edición de la concentración de motos de Marín, programada para los días 1,2 y 3 de julio. En su montaje colabora también el concello marinense. Su concejal Manuel Santos, señalaba ayer que desconocía si esa cita se iba a mantener o no a raíz del fallecimiento del piloto pontevedrés. "Ahora estamos consternados y el club está de luto por lo que ya se hablará de la concentración". No se descarta, en todo caso, que se mantenga y se convierta en un homenaje a la víctima.

El evento se ha convertido en una de las citas del inicio de verano marinense y se aguardaba la presencia de más de dos mil motos. El desánimo y la aflicción entre los allegados de Blas Fernández y en el bar que sirve de "centro de operaciones" del club, era palpable en las numerosas muestras de dolor recogidas en el propio local y, en especial en las redes sociales. Varios perfiles de Facebook con amigos del fallecido muestran crespones negros y mensajes de luto por el fallecimiento.

Siniestralidad

El accidente ocurrió en la PO-10, una carretera que une el nudo de O Pino con el enlace de la AP-9 y después desemboca en la autovía de Marín. En su día estaba catalogada como "punto negro" por su elevada siniestralidad, si bien en la actualidad no figura en los listados de la DGT. En un informe del RACE la PO-10 apareció en su día como uno de los viales más peligrosos para los usuarios de motocicletas y ciclomotores. De hecho, este mismo informe señalaba, con datos anteriores a 2012, que el 67% de los accidentes que se producían entre el nudo de O Pino y el enlace de la AP-9 estaban protagonizados por motocicletas y ciclomotores, siendo de un 50% este porcentaje en el trayecto entre el enlace de la AP-9 y la autovía de Marín.