El narcotraficante pontevedrés Florencio Groba ha sido condenado por la Audiencia de Pontevedra a seis años de prisión por un delito de tráfico de drogas, por su relación con el alijo hallado por la Guardia Civil en el vehículo en el que fue interceptado en su última detención, ocurrida en las inmediaciones del poblado chabolista de O Vao (Poio).

La sentencia, que ha sido facilitada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), considera probado que la droga incautada por la Guardia Civil, con un valor cercano a los 15.000 euros, fue adquirida por Florencio Groba con la intención de destinarla a la venta a terceras personas.

Para ello, según los magistrados de la sección segunda de la Audiencia de Pontevedra, Groba se puso de acuerdo con Jorge Ferreira, quien aceptó transportar la droga oculta en su ropa y que viajaba con el narcotraficante en su coche cuando fueron sorprendidos por las autoridades. Por estos hechos, la Audiencia condena también a Jorge Ferreira a tres años de prisión.

Además, en la vivienda de Groba se halló una balanza digital de precisión y bolsas plásticas similares a las utilizadas para elaborar papelinas, así como 7.288 euros escondidos en el congelador, 17 anillos de oro, once pulseras, dos cadenas, varios juegos de pendientes y colgantes de oro que el acusado obtenía mediante la venta de las sustancias estupefacientes.

A pesar de que Ferreira trató de exculpar a Florencio Groba durante la vista oral, asegurando que la droga la había adquirido él, el juez considera que aquel no tenía "capacidad económica alguna" para poder comprarla y no concibe tanto "altruismo" por parte del narcotraficante de ir a buscarle a su casa y llevarle a Pontevedra "sin indagar los motivos" de su viaje.

En la sentencia, los magistrados condenan a Groba a pagar una multa de 30.000 euros, cantidad que en el caso de Jorge Ferreira reducen a 20.000 euros.