Uno de los casos que se mantenían vivos hasta hace semanas era el que se conoció como la "pieza principal" de la investigación y que afectaba a la construcción de unos chalés a menos de 50 metros del cementerio de Dorrón. El fiscal solicitó el archivo de las actuaciones al no encontrar indicios de delito en la intervención ni de técnicos ni de políticos. Además, señala que se trataba de una ampliación del cementerio, por lo que no sería aplicable la zona de protección de 50 metros que se exige si se tratara de un camposanto de nueva construcción tanto en las normas urbanísticas de Sanxenxo como en la legislación autonómica.