César Mosquera considera que "los puntos críticos de este viaje" que inició la Diputación hace nueve meses para iniciar este cambio de gestión en el modelo de tratamiento de residuos "están superados". Entre estos retos superados están el impedir que el programa se convirtiese en una batalla política, captar el interés y el apoyo de los ayuntamientos o formar a los profesionales necesarios para llevarlo a cabo, objetivo logrado ayer. "Ahora solo queda conseguir que pase de ser un sistema experimental a un modelo de tratamiento en toda regla", dijo.