El alcalde de Ponte Caldelas, Andrés Díaz, ordenó a los operarios municipales el precintado del parque infantil existente en las inmediaciones de la playa fluvial, muy afectado por la acción de las crecidas del río Verdugo y los actos vandálicos de los últimos días que dejaron los juegos en una situación lamentable y peligrosa para el uso de los niños.

Segundo manifestó el regidor, la intención del equipo de gobierno es poder optar a una subvención de la Xunta o de la Diputación para poder sustituir este parque de madera por otro con homologación europea y con mayores garantías de seguridad para su uso.

La acción combinada de la humedad, las crecidas del Verdugo y los destrozos por actos vandálicos hacen inviable mantener abierta esta instalación.