La presidenta de la Diputación, Carmela Silva, firmó ayer tres nuevos contratos para la cesión de tres oficinas del vivero de empresas de Barro-Meis. La primera de las oficinas será ocupada por Coperfruit S. L., firma que se dedica a la importación y exportación de frutas. Por su parte, María Margarita Ferreira contará con la cesión de las otras dos oficinas. Esta empresaria tiene como objetivo prestar servicios de asesoramiento a personas que quieran desempeñar su actividad en el rural. En la segunda realizará labores de asesoramiento a mujeres profesionales y emprendedoras que desarrollen su trabajo en dicha área.

Silva destacó la importancia de que esta firma se realice con mujeres, puesto que "es fundamental que ocupemos el espacio que merecemos en el sector de la economía y el emprendimiento". Además, la presidenta de la Diputación hizo hincapié en el problema que padece la provincia en el área rural, pues "su despoblamiento significa el abandono del entorno" por lo que se hace "necesaria la existencia de emprendedores que apuesten por el rural".

A través de estos viveros la Diputación pretende dar acogida temporal a nuevas empresas. El vivero dispone de 24 oficinas, de las que están ocupadas cuatro; y 16 naves, de las que están todavía vacías 14. Actualmente hay tres empresas más interesadas en estos espacios.

Desembarco de Froiz

En cuanto al polígono industrial de Barro-Meis, la presidenta adelantó que en breve se firmará también el acuerdo con la empresa Froiz para que pueda instalar su gran centro logístico en este área empresarial.

El proyecto se presentó en diciembre de 2014 pero hasta ahora sufrió algunos retrasos que Carmela Silva achacó a "lo que heredamos" del anterior gobierno. Asegura que las licencias estaban pendientes de los informes preceptivos que no se habían tramitado en la anterior etapa de la Diputación Provincial.