"Con la salida de Silvia Díaz al grupo mixto el gobierno local no queda para nada debilitado porque seguimos teniendo mayoría absoluta". De esta forma diagnosticaba la salud del bipartito entre BNG y PSOE el portavoz socialista, Gregorio Agís, luego de que los nacionalistas perdiesen a una concejala tras cesarla y negarse esta a dimitir de su acta. Los tres ediles del PSOE y los seis del BNG superan a los siete del PP.

"Sí se puede llamar a esto una crisis en el gobierno local porque supone un cambio a la dinámica habitual, pero somos sensatos y esta salida no tendrá consecuencias en el trabajo que venimos realizando", afirmó Agís. En cuanto al papel que desempeñará Díaz en la oposición considera que su aportación "será constructiva" y cree que no afectará a la gobernabilidad porque la concejala "lleva avalando el trabajo del bipartito muchos años, lo volvió a apoyar cuando se renovó el acuerdo tras las últimas elecciones y apoyó la acción de gobierno". Agís contrastó el papel de Díaz en la oposición con el del PP "que hacen una política de poner palos en las ruedas" y sí vio y apunta a la unión del resto de concejales "contra la política ruin del PP en otras administraciones que llevamos padeciendo".