La naviera Maersk confirma su marcha de Vigo hacia Marín. En un comunicado remitido ayer indica que "habida cuenta de la repercusión en prensa de la decisión de Maersk Line de iniciar operaciones regulares en el Puerto de Marín", con lo que confirma su intención de traslardarse al puerto marinense.
No solo ratifica su intención de "empezar a operar regularmente en Marín", sino que reitera que esta decisión "se basa principalmente en los costos y factores operacionales previamente analizados, siguiendo un procedimiento estándar de la compañía, el cual está diseñado para asegurar el alto nivel de servicios que Maersk Line ofrece a los clientes en la región manteniendo un precio competitivo".
Respecto al sistema que empleó para elegir dónde ubicar su base en el sur de Galicia, la naviera asegura que antes de la decisión "se llevó a cabo un proceso exhaustivo, transparente de subasta con las compañías operadoras de ambos puertos, todo siguiendo criterios habituales de gestión y confidencialidad con respecto a terceras partes, habitual entre empresas privadas", según indica en su comunicado.
Con estas explicaciones la naviera Maersk responde a la preocupada por las dudas extendidas entre el tejido empresarial de la ciudad de Vigo ante su próxima actividad en Marín. Hay que recordar que el volumen de contenedores que mueve en la actualidad en el Puerto de Vigo es de algo más de 60.000 unidades anuales.
18 de mayo
En una ronda de contactos con sus clientes les asegura que a partir del 18 de mayo, fecha oficial del traslado de sus tráficos a la terminal marinense, ésta funcionará con medios técnicos y administrativos "suficientes y ágiles" para ofrecer un servicio "de alto nivel a precios competitivos".
Desde algunas empresas portuarias viguesas interpretan la citada ronda de contactos como un intento de la naviera de "evitar una espantada de clientes" por su decisión de trasladarse a Marín.
También les sorprende que Maersk envíe a sus empleados "a dar garantías de lo que no está en su mano".