La Fiscalía de Pontevedra llegó a un acuerdo de conformidad con la defensa de un acusado de guardar distancias sustancias estupefacientes en un bar de Marín. Antes de llegar a juicio, el acusado, G. V. R., asumió su responsabilidad para aceptar una pena de tres años de prisión y una multa de 5.000 euros.

En principio el fiscal solicitaba una pena de cuatro años de prisión, además de una multa de 10.000 euros, al acusarlo de un delito contra la salud pública por posesión de sustancias que causan un grave daño a la salud.

Bellotas

Según el escrito de acusación, este vecino de Marín guardaba en dicho establecimiento siete "bellotas" y media de resina de cannabis, otros tres trozos de esta misma sustancia y dos pequeñas bolsitas que igualmente contenían cannabis en su interior, así como otras 54 dosis de cocaína con un peso total de unos 28 gramos.

Según el Ministerio Público, todas estas sustancias estaban destinadas a la venta a terceros por parte del acusado. Añade además que producto de esta actividad habría obtenido los 4.488 euros que tenía en su poder en el momento en que fue detenido y que le fueron intervenidos por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía.

Valor

Además, estos habrían encontrado diversos efectos que utilizaría para la venta de la sustancia estupefaciente. El valor de dichas sustancias en el mercado ilícito habría alcanzado los 1.687 euros.

El acuerdo se alcanzó en la mañana de ayer en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra, donde se iba a celebrar el juicio que finalmente no fue necesario, al llegar a la sala con un acuerdo previo entre las partes.