Garantizar la independencia económica de las víctimas es vital para que puedan romper los lazos con su agresor. La secretaria xeral de Igualdade también hizo referencia en su análisis de los recursos que se ponen a disposición de las mujeres que han sufrido episodios de malos tratos a las ayudas económicas que la Xunta habilita para ellas. Se trata de aportaciones que pueden tener una periodicidad, como un pago único o indemnizaciones.

Según López Abella, desde 2006 el gobierno autonómico destinó cerca de 25 millones de euros a estas ayudas de las que se beneficiaron unas 3.500 mujeres gallegas.