El Consello Económico y Social (CES) de Pontevedra analizó ayer el nuevo sistema de basuras que promueve el gobierno local, basado en el reciclaje de la materia orgánica, un plan que el PP rechaza de plano, según puso de manifiesto su concejal César Abal en esa reunión. Los populares insisten en que "este modelo que quiere imponer el BNG es una ocurrencia más, fruto de la continua improvisación" y señalan que "este tipo de decisiones deberían aprobarse en pleno, pues afectarán durante años a los pontevedreses y, previsiblemente, a sus bolsillos".

Abal asegura que el gobierno local "no está contando toda la verdad a los vecinos, ya que ocultan que el recibo de la basura se va a ver incrementado considerablemente hasta alcanzar los niveles de reciclado a los que aspiran" y recuerda que "los pontevedreses pagan ya la tasa de la basura más alta de Galicia que asciende a 131,58 euros anuales, mientras que en otras ciudades como Ferrol, el mismo recibo no supera los 53 euros anuales".

Al margen del nuevo modelo de tratamiento de los residuos urbanos, la reunión del CES de ayer, la segunda de este año, tras la celebrada en enero, abordó los últimos datos sobre la situación socioeconómica del municipio y las propuestas del gobierno local en materia de empleo.