El Templo Nuevo acogió ayer el funeral por Sor Elvira Grasa Gil, falleció el pasado sábado a los 92 años de edad. Tras el entierro del domingo, Marín pudo dar su último adiós a la religiosa que dedicó su vida a ayudar a las personas más necesitadas. Monja de la Compañía de Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl de Marín fue profesora durante muchos años del colegio de la Inmaculada y también tuvo a su cargo Cáritas Parroquial donde atendió a muchas familias y personas carentes de recursos. Precisamente, en el sepelio del domingo muchos de los inmigrantes africanos que cuidó en estos años rindieron su particular homenaje a la fallecida con una muestra de las tradiciones de sus países, hasta el cementerio de A Raña.
