Los datos del Poder Judicial referidos a todo el año pasado también analizan el tipo de relación que mantenían las mujeres que solicitaron estas 120 órdenes de protección en la comarca con el agresor que las maltrató. En lo que respecta al partido judicial de Pontevedra, en la mayor parte de los casos denunciados la pareja ya había roto la relación afectiva y en un 55% de las denuncias la convivencia solo era de noviazgo, nunca llegaron a formar un matrimonio. De hecho, solo en otro 11% se trataba de un excónyuge (lo que hace que un 66% de las víctimas ya habían roto su relación con el agresor, ya fuera de noviazgo o matrimonio). Otro 11% eran cónyuges que todavía no habían puesto fin a su unión y en un 23% restante agresor y víctima eran una pareja que mantenía una relación sentimental de noviazgo todavía en vigor.