Caldas podría contar antes de final de año con la que sería su cuarta estación de servicio dentro del municipio. Después de que en 2011 el Concello recibiera el primer proyecto técnico para la construcción de una gasolinera a pie de la N-640 a su paso por Segade de Arriba, en la parroquia de San Andrés de Cesar, una empresa retomaba en los últimos meses la obra, apuntando varias fuentes la intención de que entre en funcionamiento antes del 2017.

La estación de servicio cuanta con licencias de obras y provisional de actividad. Según fuentes del Concello, la parcela mínima es de 300 metros cuadrados, con una ocupación del 20%. Este no es el primer intento que se hace de retomar este proyecto, iniciado en 2011, que fue modificado un año después y del que consta un anexo de 2013. El responsable de las obras actuales se trata de un promotor diferente al que inició los trámites para la construcción de la gasolinera y que abandonó el proyecto en su momento. La obra contaba inicialmente con un presupuesto estimado de unos 540.000 euros.

La licencia de actividad fue concedida a través de un decreto el 8 de abril de 2014. El promotor de la instalación dispone de un plazo máximo de dos años para conlcuir las obras, período que empieza a contar una vez desde el inicio de los trabajos.

La gasolinera en construcción está a las afueras de la variante este de la N-640, abierta desde 2009.

Arcos da Condesa

Con esta sería la cuarta gasolinera que permanece en activo dentro del municipio y sería la tercera que está en la N-640, ya que se suma a la de Calcote, en la parroquia de Godos, y otra en Saiar. En la N-550, está en funcionamiento otra entre Paradela y Carracedo, mientras que la otra que estaba en este vial en Arcos da Condesa, cerró en 2010. Desde entonces esta estación de servicio fue objeto de incendios y saqueos, llegando a producirse detenciones por desmontar los surtidores de combustible y actualmente presenta una imagen de completo abandono.