La espita se abrió con el paseo urbano de Os Gafos. El terreno "usurpado" en su día por el Concello que supuso una indemnización millonaria para las arcas municipales, llegó a sus propietarios, dos hermanos de Ourense, a reclamar la expropiación de otro terreno colindante en la zona de Ponte Boleira. Y lo consiguieron. Por la "usurpación" inicial lograron, por vía judicial, 1,3 millones de euros, y con su reclamación posterior al Concello para que expropiara 1.500 metros cuadrados más en la misma zona, ingresaron otro medio millón.

Para lograrlo, estos propietarios echaron mano de una norma que figura desde 1989 en el Plan de Urbanismo de Pontevedra y que establece que si un solar privado está catalogado en ese documento como zona verde, sus dueños pueden exigir al Concello que lo expropie si no se desarrolló en los cinco años posteriores al Plan. Como este documento urbanístico supera ya los 25 años, todos aquellos solares en estas circunstancias se pueden acoger desde 1995 a esta norma. Sin embargo, es apenas conocida por los propietarios en unos casos, de modo que no la ejercen, o simplemente prefieren quedarse con el terreno.

Pero en los últimos dos años algunos propietarios si han comenzado a reclamar esta actuación y así, el Concello ya se ha visto obligado a desembolsar al menos 1,5 millones de euros para adquirir unos 4.000 metros cuadrados de zonas verdes. Además del caso de Os Gafos, se registraron casos similares en O Castañal, la avenida de Compostela y, el último hasta el momento, en el Monte do Taco, en la desembocadura de Os Gafos.

Una vez que se recibe esta petición de los dueños, la administración local está obligada a atenderla y expropiar el terreno, pero no siempre al precio que exigen los interesados, lo que suele derivar en un largo pleito sobra las valoraciones que acaba en unos casos en el Jurado de Expropiaciones y en otros en el juzgado.

Este fue el caso de una parcela de 900 metros cuadrados en la zona de O Castañal, donde una empresa acudió a aquella norma del Plan de Urbanismo, reclamando 3.000 euros por metro cuadrado, cifra que el Supremo rebajó a 200, más cerca de las tasaciones habituales de los técnicos.

El último caso hasta el momento se registró el pasado mes de enero, cuando el Concello expropió, por exigencia de sus 13 dueños, unos terrenos de 1.400 metros cuadrados para crear una nueva zona verde en el Monte do Taco. El precio final rondó los 500.000 euros y la intención municipal es incorporar este nuevo espacio verde a las mejoras realizadas en la zona y conectar el barrio hacia Os Gafos y la avenida de Marín.

No se puede hacer lo mismo con una sucesión de parcelas situadas entre Pasarón y la avenida de Compostela. Una de ellas, de apenas 180 metros cuadrados, fue expropiada en julio pasado por esta vía, pero el resto siguen siendo privadas, lo que impide su acondicionamiento. Salvo que todos los dueños sigan la misma vía, lo que obligaría al Concello a expropiarlas y comprar jardines a la fuerza.