El querido gallo Fodorico Agusto Bastante fallecía esta semana cuando cumplía sus 28 años, "víctima de una ataque de gusto". Poio se pone el luto este sábado para el Enterro do Galo Fodorico en la celebración que pondrá fin a prácticamente un mes de carnavales en el municipio. El cortejo fúnebre saldrá desde la plaza del convento hasta la plaza de Arís, donde tendrá lugar la lectura del testamento y posterior incineración en un recinto que estará cubierto por una gran carpa, por si el mal tiempo no acompañase.
El municipio celebrará el vigésimo octavo entierro del Galo Fodorico, una fiesta que se ha convertido, en palabras de la concejala de Festexos, Lidia Salgueiro, en "la más importante tras el desfile" en el que es uno de los carnavales con más actividades de la comarca. Se trata de una fiesta que tiene su origen en otras tradiciones del carnaval piense. "Antiguamente se hacían las corridas do galo, que se perdieron por eso se decidió que la figura el entroido de Poio fuese un gallo", explica Alfonso Villanueva, de la asociación Ronsel. "En Arís se hacía una piñata artesanal hecha de barro, que llevaba harina galletas o un propio gallo en sí. Fue una forma de recuperar esta tradición, pero llevándola a los días de hoy", continuaba Salgueiro, haciendo referencia a que ya no se hace sufrir a gallos vivos, sino a un monigote que la asociación Ronsel realiza durante un mes.
Un Galo Fodorico, que en esta edición irá vestido de viticultor, como revelaban la Salgueiro, Villanueva y Elena Barral y Belén López, de la asociación Ronsel. "Tiene algo de crítica, porque el sector vinícola es muy importante en Poio y, salvo Pontevedra, todos los municipios de los alrededores están dentro de la DO Rías Baixas, menos nosotros", destacó Villanueva.
Por eso, el encargado este año de leer el testamento será Xoán Canas, director del Instituto Galego do Viño, mientras que la encargada de poner en marcha la incineración este año será la propia concejala de Festexos, en el primer año que asume este área municipal.
Pero no solamente se espera que la presencia de choqueiros, deudos y viudas de Poio. El Enterro do Galo Fodorico llama cada vez más la atención en toda la comarca. "Por las fechas y porque nos gusta mucho la fiesta, por eso es por lo que la gente viene", comentan desde Ronsel, aunque matizan que sobre todo piden participación vecinal en la celebración. Los vecinos podrán disfrutar de la verbena con el Trío Azabache después de la incineración.
