El gobierno local estudia cambios de circulación y mejoras de movilidad en la calle Herminia Fariña Cobián, que sirve de acceso al instituto Torrente Ballester, debido a las molestas que ocasiona la entrada y salida del garaje de un supermercado en esa misma calle, una situación que genera quejas vecinales trasladadas ayer al concejal Luis Bará durante una visita a la zona para coordinar pequeñas obras de mantenimiento.

En el recorrido, el edil anunció que también se actuará en mejorar la accesibilidad en la calle Bibiano Fernández Osorio Tafall y otras transversales a Herminia Fariña y se mejorará de nuevo el aparcamiento disuasorio de Urbano Lugrís, junto al instituto, con cuyo director mantuvo Bará una reunión de trabajo.

Asimismo, están a punto de concluir los trabajos de arreglo de las aceras y del jardín de la avenida da Estación ubicada ante la nueva rotonda de conexión con la calle Josefina Arruti. Estas labores cuentan con un presupuesto de 60.000 euros y se extienden a otros puntos próximos, como la calle Fernando II, donde se reemplazarán los árboles existentes por otros ya que los actuales generan también quejas vecinales ante la proliferación de insectos y otros problemas que impiden pasar cerca de los ejemplares.

La visita a esta zona sur de la ciudad forma parte de una ronda de recorridos por diversos barrios por parte de Luis Bará, que ya comenzó la pasada semana en el entorno de José Malvar y Casimiro Gómez.