El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, volvió a referirse ayer al polémico acuerdo adoptado por la Corporación municipal de Pontevedra el pasado lunes mediante el cual se le declara "persona non grata" en la que es su ciudad. Rajoy, tras insistir en que se siente pontevedrés, reiteró su profundo malestar por esta declaración al señalar que "ni a Hitler ni a Stalin los declararon personas non gratas en Pontevedra, yo soy el único en la historia de la ciudad que soy persona non grata" algo que para el mandatario demuestra que este acuerdo "no tiene ningún sentido".

El presidente del Gobierno realizó estas declaraciones en el transcurso de una entrevista con la periodista de Antena 3 Susana Griso, a quien no ocultó su malestar por este hecho. Reconoció que en otras ocasiones una circunstancia de este tipo se podría "despachar" sin realizar comentario alguno o "con alguna ocurrencia", pero explicó que, en este caso, "sí realmente me ha fastidiado". No solo a él, sino también "a mi familia". "He sido concejal allí, he vivido allí, me he casado allí, tengo amigos y familia..., me ha dolido mucho y me tengo que fastidiar", se lamentó.

La carta del alcalde

El presidente del Gobierno no mostró sorpresa por el apoyo del PSOE y Marea (a quienes definió como "los colegas de Podemos en Galicia") a esta declaración (de la que fueron sus impulsores) pero sí que manifestó cierta decepción con la postura adoptada por el BNG y especialmente por el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores. "De estos (dijo en referencia a socialistas y a Marea) me lo esperaba, pero del alcalde no", señaló Rajoy quien recordó que Lores le remitió una carta para solidarizarse con él después de que el presidente del Gobierno resultase agredido durante un paseo electoral en A Peregrina en diciembre pasado. Una misiva a la que Rajoy contestó personalmente y que "agradecí mucho" por tratarse del "alcalde de mi ciudad".

El presidente del PP considera que el alcalde "no debió haberlo hecho" -apoyar esta iniciativa de PSOE y Marea- pero también reconoció que "no se lo reprocho" dado que "probablemente desde el punto de vista político para él era muy complicado". Con todo insistió en que "no debió haberlo hecho dado que no gana nada".

Rajoy reconoció que esta declaración le duele más que la agresión que sufrió en diciembre, dado que aquello fue un hecho de una persona aislada y en este caso se trata de una declaración de una Corporación.

Tras recordar a la periodista que Lores pertenece al Bloque Nacionalista Galego, Rajoy se mostró convencido de que el PSOE de Pontevedra actuaba por iniciativa propia y sin el conocimiento de Ferraz. Señaló que, en su caso, si alguien del PP de León le llamase para informarle de que iba a proponer declarar persona non grata al expresidente Rodríguez Zapatero, él le habría contestado "¿está usted loco o qué?".