El ingeniero municipal fue el primero que, en noviembre de 2010, elaboró un documento técnico base al que se aferra el gobierno local a la hora de decidir el diseño de los lombos. El informe de este responsable relativo a la última propuesta del PP, firmado el 18 de febrero (el mismo día que el de la Policía Local y cinco jornadas antes del pleno del pasado lunes) muestra sus reticencias a aplicar las normas de Fomento. "No parece lógico recurrir a los criterios de diseño de carreteras para garantizar la seguridad de los peatones, del mismo modo que las instrucciones de trazado de carreteras, de definición de intersecciones o de iluminación de carreteras no se aplican en ciudades".
En todo caso, este mismo ingeniero admite que "este tipo de solución -los "lombos"- para los pasos de peatones dentro de la ciudad no responde exclusivamente a criterios técnicos, sino también de oportunidad política, ya que es el grupo de gobierno local quien propone los criterios básicos para el diseño de los espacios públicos del municipio".
Vuelta Ciclista
Un apartado de la propuesta del PP apunta a las "molestias" que los pasos sobreelevados causarían a los ciclistas, capítulo que rebate este informe: "Sobre la bicicleta, en la moción presentada se señala que estos dispositivos distorsionan la conducción en bicicletas, motos y ciclomotores" y al respecto "podemos decir que los servicios técnicos municipales han participado en la preparación de tres etapas en distintas ediciones de la Vuelta Ciclista a España, con supervisión previa de los organizadores de la prueba, sin que pusieran inconveniente alguno por la presencia de estos elementos en las calles. El posterior paso del pelotón a velocidad considerable sobre distintos pasos sobreelevados en varias calles de Pontevedra confirmó la previsión de la organización.
