Desde la Sociedad Gitana en Galicia manifestaron ayer su satisfacción por el hecho de que se haya llegado al "juicio payo" sin que "se haya celebrado anteriormente, como suele pasar habitualmente el juicio gitano".

Según confirma la propia familia de Lupe, el asesinato de esta mujer también se llevó por delante a su madre, María Jiménez, conocida como la Tía Pía, y que falleció durante la instrucción del caso, según sus allegados, por el "dolor" causado por la pérdida de su hija.

Según Sociedad Gitana, la Tía Pía estaba "obsesionada con hacer cumplir la ley gitana, la del ojo por ojo y diente por diente" pero desde este colectivo aseguran que "poco a poco" los "consejos de ancianos gitanos fuimos convenciéndola de que la Justicia paya sería la más adecuada ya que contábamos y confiábamos en todos los apoyos recabados en nuestra campaña por conseguir que todas las administraciones públicas, incluida la Xunta de Galicia y la propia Fiscalía, actuarían con contundencia tal y como nos lo trasladaron en su día".

Los días posteriores al juicio se produjo un éxodo masivo, un "destierro" en palabras de líderes gitanos, de miembros de la familia Cortiñas de toda Galicia hacia localidades fuera de la comunidad autónoma por miedo a venganzas por parte de la familia de la víctima. Sociedad Gitana se congratulaba ayer de que finalmente se haya llegado al juicio sin incidentes.

Con todo, como medida preventiva y ante los antecedentes de este caso, el de hoy será un juicio que contará con un refuerzo de las medidas de seguridad en torno a la Audiencia Provincial de Pontevedra.