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El Concello cierra el 2015 con un remanente de más de 450.000 euros

El dato negativo es que por 50.000 euros se debe hacer un plan de ajuste

El Concello cerró esta semana el Estado de liquidación del presupuestos de gastos de 2015 que deben ser entregados antes de marzo para la rendición de cuentas. El alcalde, Luciano Sobral, hacía público el balance en el que se arrojan, generalmente datos positivos entre los que está el alto remanente de tesorería, pero también alguna sombra como que en 2015 el Concello superó por 50.000 euros la regla de gasto por lo que obliga a Intervención a realizar un plan de ajuste para este 2016, para justificar este incumplimiento.

"Es curioso que habiendo remanente de tesorería se produzca este desfase en el que se gastó más de lo que se ingresó por esta cantidad", señala Sobral. Y es que el Concello cierra las cuentas con más de 450.000 euros de remanente de tesorería con lo que se indica una gran solvencia o capacidad económica de la administración local para afrontar sus deudas. Para ello se cuantifican, por un lado, los fondos líquidos de la institución (dinero en caja y bancos) más los derechos reconocidos pendiente de cobro, restando a todo ello las obligaciones que están pendiente de pago.

Dentro del apartado positivo que muestran las cuentas de 2015 es que se cumple la ley de estabilidad y el ahorro neto también es positivo. Pero también en el amortización de la deuda se sitúa en el 58%, muy por debajo de lo que fija la ley como máximo, que se encuentra en el 75%.

"Salió un presupuesto bueno en la ejecución y cumpliendo los plazos", señaló Sobral que destacaba que los datos permitirá establecer un plan de inversiones con parte del remanente de tesorería. El regidor también se mostró optimista, ya que estos datos se lograron pese a que las tasas municipales "llevan 3 años congeladas sin que la calidad de los servicios se vieran mermados". Además, este lunes se formalizó la petición de crédito por 500.000 euros contemplado en el presupuesto para el presente año.

La principal sombra de que arroja las cifras es el incumplimiento de la ley de gasto por 50.000 euros, lo que obliga a un plan de ajuste que se realizará con cargo a las plazas de personal que están vacantes por las jubilaciones, en un año en el que, después de varios años sin poder contratar, se sacarán tres plazas nuevas y cuatro de promoción.

Por otro lado, en el pleno de este mes se llevará a aprobación el reconocimiento de modificación de crédito de unos 50.000 euros procedentes del remanente de tesorería, de 125.000 euros de la subvención anual de la Diputación y 220.000 euros procedentes del crédito para la financiación del gasto corriente e inversiones de 2015, todo de facturas sin partidas del pasado presupuesto. Actualmente, este desfase que se viene arrastrando desde 2010, cuando hubo que rebajar el presupuesto municipal en casi dos millones, por debajo de los 700.000 euros. "Tenemos marcado que entre 2016 y 2017 se elimine este desfase", señalaba el alcalde. Precisamente estas cuentas fueron denunciadas por el PP ante Fiscalía en sucesivas aves en los últimos años.

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