Los veciños de Caritel expresan su preocupación ante la posibilidad de derrumbe inminente de la espadaña que sustenta las campanas de la iglesia parroquial que sufrió hace unos días, a causa del último temporal, el desprendimiento de parte da su fachada. El templo religioso se encuentra acordonado para evitar que el público pueda sufrir cualquier accidente en el caso de que se produzcan nuevos desprendimientos.

Miembros de la junta directiva de la Mancomunidad de Montes de Caritel iniciaron ya contactos con el Arzobispado de Santiago para poner en su conocimiento la situación del templo y se ofrecieron a mediar ante administraciones como la Diputación, Concello y Xunta para encontrar una solución que evite el desplome de la espadaña, así como la restauración de la fachada de la iglesia. También advierten de la peligosidad que presentan dos contrafuertes que perdieron su verticalidad y que habría que corregir para que sigan prestando su cometido.

Patrimonio arquitectónico

Además de cumplir una función social, la iglesia parroquial de Caritel forma parte del patrimonio arquitectónico religioso existente en el municipio de Ponte Caldelas y contaba con celebración dominical de misa que podría interrumpirse ahora debido a este incidente.

Los vecinos están preocupados por evitar que este templo sufra mayores desperfectos si no se actúa de manera inmediata por lo que solicitan a las administraciones municipales, eclesiásticas y autonómicas encargadas por velar por el patrimonio histórico ye monumental que coordinen esfuerzos, incluso con colaboración vecinal, para que se evite el desmoronamiento de la espadaña y siga aumentando el daño estructural de la fachada de la iglesia parroquial.