Los vecinos de la avenida de A Seca en Poio se vieron afectados ayer por un nuevo corte en el servicio de agua. Según apuntan los vecinos de la zona, se trata de un problema que vienen arrastrando en los últimos años, al estar formada la red de abastecimiento de la zona por una obsoleta tubería de cemento, por lo que en el último mes se produjeron 5 cortes de auga y cuentan ya hasta 30 en el último año.

Los operarios municipales de Poio y Viaqua actuaron en el entorno para restablecer el servicio en torno a las 13 horas. El corte había sido detectado en torno a las 7 de la mañana. El propio alcalde, Luciano Sobral confirmaba las actuaciones que consistieron en la instalación de una válvula para proveer a los vecinos de agua de la atraída de Combarro en lugar de la general ya que transcurren de forma paralela. Una medida que el regidor reconocía como de "parche" mientras que apuntaba que desde el Concello están buscando presupuestos para reponer la tubería de cemento.

José Pousada era la voz de los vecinos afectados, unas quince familias. A pesar de ser un trabajador en paro, señalaba que la idea de poner una válvula surgió de él. "Estamos indignados porque llevamos muchos años así. Pagamos por un servicio de primera y tenemos uno de cuarta", señalaba Pousada, que señalaba como en los últimos años se le estropeó una caldera y la grifería por estos daños y pedía a los responsables "másyor sensibilidad", que en casos como el supyo, hay también mayores afectados.