"Es evidente que estamos muy contentos. Hemos luchado mucho por esto". La plantilla de Ence en Lourizán está exultante por la concesión de la prórroga hasta 2073 y así lo dejaba claro ayer el presidente del comité de empresa, Pedro Soto, que ha convocado para mañana miércoles una reunión de este órgano y "habrá celebración, sin duda". Soto Blanco, al que la noticia pilló de vacaciones, era informado de la concesión en la mañana de ayer por parte del propio consejero delegado de la compañía, Ignacio de Colmenares y "después llegaron llamadas del director (de la fábrica de Pontevedra), de responsables de Recursos Humanos, de todo el mundo".
La prórroga que garantiza la continuidad de Ence a orillas de la ría acaba de "largos meses de incertidumbre" y supone, a juicio de los trabajadores, el espaldarazo definitivo para poner en marcha el Plan Estratégico de inversiones anunciado por la empresa en noviembre pasado. De hecho, ya están programadas dos paradas técnicas este año. La primera de ellas, la habitual de cada año, comenzará el 7 de marzo y se destinará a las acostumbradas tareas de mantenimiento, pero la parada crucial será a final de año, "para comenzar la fase de ampliación" vinculada al Plan Estratégico y derivada de la prórroga de ayer, según explicó Soto Blanco.
Con la concesión por sesenta años más ya bajo el brazo, el personal confía en que Ence decida definitivamente la instalación en Lourizán de la planta de biomasa otorgada hace unos días a la empresa por el Ministerio de Industria, una planta de 40 megawatios que se sumaría a la ya existente, de algo menos de capacidad, en la factoría pontevedresa. Citando también el proyecto de una nueva turbina eléctrica, el presidente del comité de empresa subraya que con esas ampliaciones ya se "generará más mano de obra" y recuerda las pretensiones de la compañía de ampliar los empleos tanto durante los trabajos de mejora y ampliación, como a posteriori. No obstante, admite que no está fijado un número concreto de nuevos puestos de trabajo, si bien "calculamos que ese número deberá crecer en la misma proporción que la producción", que podría elevarse en un 30% al final del proceso.
De 230 a 270 trabajadores
De hecho, Soto Blanco recuerda que "ya en los últimos tiempos, con vistas a estas ampliaciones, se aumentó el número de empleos y la prueba está en que el comité de empresa pasó de nueve a trece miembros". Añade que "antes éramos unos 230 y ahora somos algo más de 270 trabajadores -en la planta de Lourizán- porque se contrató a numerosos técnicos para la ampliación y suponemos que si se instala la nueva planta de biomasa y la turbina, ese número crecerá aún más". El pasado 14 de enero Ence anunciaba la concesión de la citada planta de biomasa y revelaba que manejaba tres posibles ubicaciones para ella: Pontevedra, Villaturiel (León) y Huelva. La decisión final dependía de los apoyos "institucionales y administrativos" para su implantación. Según sus datos, esa instalación "generará más de 300 puestos de trabajo durante los dos años de construcción y cerca de 750 más, directos e indirectos, una vez puesta en marcha".
Al margen de esa actuación, la plantilla recuerda que "están en marcha proyectos de integración paisajística, de mejora en materia de olores y vapores y una depuradora de tecnología de membrana muy innovadora" que también serviría para generar puestos de trabajo, apunta Soto.
