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"Hay alternativas, pero dan más trabajo"

Los "lombos" de Pontevedra se extienden ahora a muchas de las vías rurales y carreteras secundarias que circundan la ciudad. Según el experto en seguridad vial Celso Paz, "en la mayoría de esos sitios no hacen falta; además esos badenes tienen alternativas mejores, como ya se ha demostrado". Entre éstas apunta el "riñón de velocidad", un "lombo" más amplio y menos agresivo, que facilita el paso a un vehículo que no circule a una velocidad excesiva, como los implantados en Valencia. También sugiere las "almohadas" o "cojines berlineses", menos invasivos y que facilitan el paso de motocicletas y vehículos pesados, con ejes más anchos que los turismos.

Los "lombos" se siguen implantando -afirma el especialista- porque "es la alternativa más fácil para la Administración, porque lo colocan y ya no tienen que preocuparse más". Las otras alternativas, con sistemas ya implantados en otras ciudades para controlar la velocidad, son instrumentos menos agresivos que "quizás dan un poco más de trabajo, pero a cambio no castigan a todo el mundo, como ocurre con los lombos", explica Paz.

El experto cuestiona también el coste que está suponiendo la creación de estos "lombos" para el erario público. "Para hacer este estudio yo he visto cómo se construyen los badenes, he seguido todo el proceso y me he interesado por los presupuestos de las empresas. Y decir que eso cuesta los miles de euros que se reflejan en las facturas, creo que es algo a investigar", propone.

Critica además la asambleas que el gobierno local ha convocado en determinados barrios para recabar la opinión de los vecinos. "Me hace gracia esa especie de democracia ficticia que han montado. Decisiones de este tipo se deben tomar con criterios técnicos y pensando en el bien común, no preguntándole al vecino de la casa de enfrente".

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