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Nieves Segovia: "Decimos fracaso escolar porque solo se evalúa al alumno, pero es un fracaso de todo el sistema"

"Ese 30% de abandono es una tragedia, lo que más compromete al futuro de nuestro país"

Nieves Segovia: "Decimos fracaso escolar porque solo se evalúa al alumno, pero es un fracaso de todo el sistema"

"El sistema educativo es muy conservador, la razón de por qué en él no se produce el cambio que si se ha generado en cualquier otro sector, de por qué no ha llegado el tsunami y ha transformado los medios de comunicación como muchísimos otros, es porque el sector está muy blindado, regulado, es obligatorio, la administración lo tiene muy cerrado y no hay la relación posible de oxigenación entre el sistema educativo y lo que pasa fuera, otras instituciones, empresas, familias, profesionales...". Lo explica Nieves Segovia, que hoy encabezará el acto con el que el colegio SEK Atlántico conmemora sus 25 años de andadura.

-¿Estamos en un momento de replanteamiento del modelo educativo?

-Totalmente, estamos de acuerdo en que hay una crisis del modelo educativo como hay una crisis de muchos modelos, sociales, políticos, económicos, de un ciclo anterior que ya está agotado y desde hace tiempo el modelo educativo tradicional no ofrece resultados. Todos estamos de acuerdo en que este modelo es industrial, que evidentemente no prepara para las competencias necesarias en el siglo XXI, para lo que demandan las empresas ni responde a la manera en que los alumnos de comunican, aprenden y acceden al conocimiento y sin embargo hay muy pocas evidencias de experiencias reales de colegios y aulas que realmente hayan asumido el reto de la transformación.

-¿Hacia dónde debería caminar la educación?

-Más que de educación prefiero hablar de aprendizaje, eso en lo que el alumno es activo, los modelos no deben centrarse en el profesor que enseña sino en el alumno que aprende. Y no solo el alumno que aprende siendo el un estudiante sino que el profesor también es un sujeto que aprende y ese concepto de aprendizaje al final tiene que permear a toda la comunidad, todos estamos aprendiendo nuevas formas de trabajar, comunicarnos, vivir, utilizar recursos tecnológicos que ahora están a nuestra disposición, todos estamos en un proceso de aprendizaje, el colegio tiene que aprender también. Esa es una clave, es muy difícil pedir a un alumno que sea activo en el aprendizaje en una institución educativa, tradicional, pasiva, que no asume el riesgo de la transformación y el debate. Debemos de ir además hacia modelos mucho más personales, gracias en parte a la innovación tecnológico podemos hacer acciones de aprendizaje realmente personales, en que cada alumno puede desarrollar su propio itinerario de aprendizaje, puede aprender de acuerdo a su ritmo y estilo, no hay un modelo único y unidireccional que no invita a la participación, en ese modelo el único que sale cansado del aula es el profesor, cuando el que debe trabajar sobre todo es el alumno.

-¿Este tipo de experiencias se están extendiendo?

-Al menos el debate se ha generalizado, uno de los rasgos de esta institución es la permanente innovación, decir que llevamos más de 100 años podría parecer que es que llevamos 120 años haciendo igual las cosas, pero no, para nosotros la tradición es siempre la innovación, en cada momento hemos intentado conectar con aquello que nos pedía la sociedad, pensando en el servicio a los alumnos, en su vida y su trabajo posterior. Hace años que nos dimos cuenta que teníamos que acelerar esa innovación y uno de los cambios holístico de modelo que hicimos se remonta a 1995, pensemos la tecnología de hace 20 años y ya hablábamos de espacios abiertos, de comunidades de aprendizaje, de tecnología incorporada a las aulas, de redes sociales que realmente no existían todavía, ese aula inteligente en el que profesores y alumnos trabajan cosas, en que se individualiza el proceso y en la que pasan tantas cosas fue un embrión en 1995 que hemos ido desarollando, porque la idea y la visión era la adecuada. En un momento nos dimos cuenta de que esa visión teníamos que acelerarla porque lo que estaba pasando fuera iba mucho más rápido, así que incorporamos la tecnología de una manera natural, porque lo cierto es que si el aula no está preparada la tecnología molesta, todo tiene que estar coordinado para facilitar su uso.

-Las tasas de fracaso escolar en España son inaceptables

-El alumno por desgracia es el sujeto pasivo del sistema, por un lado el único al que se evalúa, al sistema, al Estado o al profesor no se les evalúa pero si al alumno, y luego hablamos de fracaso escolar, que al final es el fracaso del alumno, pues lo siento mucho, decimos que es fracaso escolar porque al alumno es al único que se evalúa, pero en realidad es un fracaso de todo el sistema. Y con es mirada puesta en el estudiante que es el único que está experimentando algo vital en su biografía y al que no se le pregunta, él puede participar en el proceso de innovación.

-Ninis, abocados al botellón, un 30% de los alumnos fuera del sistema educativo... Los jóvenes de este país están muy cuestionados.

-Mucho, a veces no siempre se celebra a nuestros jóvenes, les hemos culpabilizado del fracaso escolar, cuando son las víctimas, ese 30% de abandono escolar es una tragedia, es lo que más compromete el futuro de nuestro país, España tienen recursos naturales, el sol, materiales los que tiene pero, sobre todo, tenemos recursos humanos, y 3 de cada 10 jóvenes están fuera del sistema, más allá del drama personal que supone para el alumno, familiar, con respecto a sus expectativas de futuro y de coste para la sociedad, el fracaso escolar es un drama para el país, no nos podemos permitir el lujo de perderlos, es algo intolerable y es el problema del propio sistema.

-Porque usted advierte que no siempte fracasan los peores...

-No, se tiene la idea de que fracasan los del botellón etc, y no, fracasan los desmotivados, nadie se pregunta por qué lo está, si el sistema le ha ofrecido las respuestas que pedía, y muchas veces el sistema aparta a alumnos brillantes pero que piensan diferente, y esos para el sistema tradicional por desgracia son alumnos incómodos, preferimos un modelo más compartimentado, unidireccional, jerárquico que los aparta, cuando muchas veces son supercreativos que acaban trabajando en empresas tecnológicas y les preguntas por sus estudios y en ocasiones dejaron el sistema y tuvieron la suerte de poder reengancharse, pero no les hemos acompañados, como sociedad somos muy injustos con los jóvenes, si éstos están teniendo problemas los mayores tendremos que asumir alguna responsabilidad.

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