Las dos mujeres de nacionalidad rumana detenidas por la Policía Nacional por su relación con una red que supuestamente explotaba a compatriotas suyas y las obligaba a ejercer la prostitución en el entorno del nudo de O Pino quedaron en libertad con cargos tras declarar en el juzgado.

Fuentes policiales señalaron que además de estas dos personas, se realizarán las gestiones oportunas para que respondan ante la justicia española las otras cuatro personas imputadas por pertenecer a esta trama. Todos ellos son miembros de un mismo clan familiar. Tres de ellos habrían sido identificados por la Policía Nacional que los sitúa en su país de origen, en Rumanía, y un cuarto se encuentra en prisión en Italia cumpliendo condena por un delito similar al que ahora se le atribuye aquí en España.

Según explicó la Policía Nacional, las víctimas estaban siendo explotadas sexualmente y se encontraban sometidas por el clan familiar tras ser captadas en su país de origen. Los miembros de esta organización se prevalían del escaso nivel cultural de las mujeres así como de sus necesidades económicas para que ejerciesen la prostitución, en este caso en plena calle, en el entorno del nudo viario de O Pino, en San Blas.

Son habituales las denuncias vecinales por la presencia de mujeres ejerciendo la prostitución en esa zona de las afueras de Pontevedra, sin embargo, en esta ocasión la investigación policial surgió ante la alarma que generaron entre los vecinos las graves disputas que mantenían dos grupos distintos por el control de la prostitución callejera en esta zona, llegando a producirse algún amago de pelea por los lugares en que cada organización quería situar a las mujeres.

La Policía Nacional recuerda que recientemente se habilitaron varios cauces para denunciar situaciones de explotación sexual y trata de seres humanos a través de los teléfonos 900 105 090 y en el correo electrónico trata@policia.es.