El alcalde de A Lama, Jorge Canda, dijo ayer estar "tranquilo" una vez que se conoce que un juzgado de Pontevedra mantiene la imputación contra él por la destrucción con unas obras de un tramo del denominado "Camiño dos Arrieiros", una ruta que históricamente enlazaba Ribadavia con Pontevedra, para construir un camino convencional.

Canda dijo sentirse "extrañado" por la decisión del juez de no archivar el caso en contra incluso "de la opinión del fiscal", pero se mostró confiado en que finalmente no tenga que afrontar ningún tipo de responsabilidad penal por esta obra, dado "el camino no está catalogado" por Patrimonio por lo que considera que "se actuó con todas las de la ley". Recordó que fueron los propios vecinos los que "en una asamblea", solicitaron el arreglo de esta vía para que los vehículos pudieran acceder a varias viviendas de la zona. "Me imagino que estas personas también tienen derecho a tener un vial para poder acceder a sus casas con un vehículo", dijo ayer el alcalde.

Recordó que fueron los propios vecinos los que cedieron los terrenos para la ampliación del camino y que el Concello puso los mismos a disposición de la Xunta, "que fue la que finalmente ejecutó la obra".

En cuanto al valor de la vía histórica que acabó siendo destruida, Canda asegura que "yo no sabía nada de que tenía ese valor o era el Camiño dos Arrieiros, a mí nadie me comunicó nada y es más, aquí en A Lama tenemos varios caminos de Os Arrieiros por los que tradicionalmente se traía el vino de O Ribeiro a Pontevedra en los que, de hecho, se están arreglando y conservando otros que sí conocemos". "Estoy tranquilo, si hay alguien que destaque por la defensa del patrimonio ese soy yo", añadió.

El juzgado dio ahora un plazo de diez días para que los denunciantes (la Comunidad de Montes de Verducido) o el fiscal (que en su día pidió el archivo de la causa) presenten acusación o soliciten en sobreseimiento. Si ninguno de los dos presenta acusación, el caso tendría que cerrarse.