El Pontevedra ha vuelto a verse sorprendido en Pasarón por otro rival modesto. En su cita de esta tarde contra el Betanzos dominó, pero fue incapaz de adaptarse a las circunstancias y, sobre todo, a un terreno de juego que se había convertido en barrizal.

Los granates tuvieron ocasiones claras de gol, pero frustradas en los últimos instantes y, varias veces, por resbalones sobre este terreno en mal estado. La conservadora estrategia de los visitantes resultó evidente a lo largo de los 90 minutos, con apenas unos cuantos acercamientos a la portería de Edu.

A pesar de este tropiezo, Manu Fernández y los suyos siguen segundos en la clasificación. El liderato, eso sí, se aleja y ahora queda a cuatro puntos.