El consejero delegado de Ence, Ignacio de Colmenares, ha transmitido al alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, su "profunda indignación" por la comparación realizada esta semana entre los fallos técnicos registrados en los últimos días en la fábrica de Ence y los accidentes ocurridos en la planta química Brenntag de Caldas y la central nuclear de Chernóbil por parte de la concejal de protección ciudadana, Carme da Silva.

Colmenares se ha referido a esas comparaciones como "mensajes gravemente alarmistas" y las ha atribuido al "desconocimiento" o la "manipulación" informativa.

En una carta con fecha de este miércoles enviada al regidor municipal de Pontevedra, el consejero delegado de Ence ha aclarado que la fábrica pastera "no alberga ninguna sustancia que pueda generar un problema de salud pública y mucho menos riesgo para la ciudadanía".

Argumentando que la empresa "tampoco lo necesita para su proceso industrial", el directivo de Ence ha asegurado que la factoría "no almacena ningún producto químico peligroso en grandes cantidades".

Por ello, Ignacio de Colmenares ha insistido en que "alarmar" a la población con esas comparaciones es "una actitud irresponsable que le hace un flaco favor a Pontevedra y al sector forestal gallego".

INFORMES

La carta enviada a Fernández Lores contiene sendos informes sobre las incidencias registradas en el Centro de Operaciones de Ence los días 11 y 17 de agosto. La primera originó dos episodios olorosos que, así como "durante años fueron habituales, ahora resultan extraordinarios", ha precisado Colmenares.

Redundando en las explicaciones ofrecidas por la empresa tras la primera avería, el consejero delegado de Ence ha señalado en su misiva que esas emisiones a la atmósfera "no generan afecciones respiratorias ni son tóxicas", además de que estuvieron "muy por debajo de los límites legalmente establecidos en la Unión Europea". En la medida en que "no supuso incumplimiento de ninguna norma", la empresa sostiene que no era necesario informar a las autoridades.

Sin embargo, el jefe de Calidad y Medio Ambiente de Ence, Carlos Casas, ha apuntado en su informe sobre los episodios olorosos que aunque el incidente "no supuso vulneración" de las condiciones establecidas en la Autorización Ambiental Integrada, se informó del mismo por fax y por correo electrónico a la Secretaría Xeral de Calidade e Avaliación Ambiental.

No así en el caso del fallo eléctrico que se produjo el pasado 17 de agosto, por el que "no se ha realizado ninguna comunicación a organismos oficiales", según Carlos Casas, porque aquel incidente "se encuentra dentro de lo que se puede considerar normal" en una fábrica y tampoco incumplió la Autorización Ambiental.

Con respecto a esta última incidencia, el consejero delegado de Ence le ha explicado al alcalde que, después de que la empresa haya invertido más de 4 millones de euros para reducir sus emisiones de vapor de agua, "ahora se pueden hacer más notables cuando se aprecian con más intensidad". La causa de esta emisión fue un corte en el suministro eléctrico que, según Colmenares, "no tiene impacto en las emisiones olorosas".

DESCONOCIMIENTO

En la carta dirigida al alcalde de Pontevedra, Ignacio de Colmenares se ha quejado de que tanto el propio Miguel Anxo Fernández Lores como otros miembros del gobierno local tienen un "profundo desconocimiento" de la factoría. Así, el consejero delegado de Ence le ha informado al regidor municipal de que la fábrica de Lourizán cuenta con 320 empleados, en vez de los 200 a los que Fernández Lores se había referido.

También le ha indicado que Ence genera más del 40% del movimiento de mercancías generales del Puerto de Marín y que contando con los puestos de trabajo indirectos y los vinculados al sector forestal, la cifra de empleos relacionados con Ence ronda los 5.000 en toda Galicia. Además, Colmenares le ha recordado a Fernández Lores que "solo en Pontevedra, los gastos de personal y de compras de bienes y servicios a empresas locales supera los 36 millones de euros anuales".

"Entendemos que usted prefiere que la fábrica de Ence cierre, pero eso no le autoriza a mentir ni a alarmar", le ha recriminado Antonio de Colmenares a Fernández Lores, al que se ha ofrecido para facilitarle al ayuntamiento de Pontevedra "toda la información que quieran sobre la empresa o el funcionamiento de la fábrica de Lourizán".

Colmenares ha finalizado su carta reiterando el "compromiso" de Ence de "erradicar completamente" los olores que produce en 2014, y anunciando que la empresa adoptará medidas para que esa circunstancia "molesta para la ciudadanía, no se vuelva a repetir".

XUNTA

Por otra parte, la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas ha instado a Ence a que "ante tipo de situaciones, avise al 112, a los Bomberos y al Ayuntamiento".

Los responsables de este departamento de la Xunta están elaborando un informe a partir de los datos obtenidos por los técnicos de la Secretaría Xeral que este martes se han trasladado a Pontevedra para hacer una "inspección in situ".

Inicialmente, la información recabada en las estaciones de medición ha determinado que la parada de un motor, el pasado 17 de agosto, "originó un escape de vapor de agua, registrándose picos puntuales, que no superaron los valores límite autorizados".