La Guardia Civil estaba ayer de aniversario. El Instituto Armado cumplía 169 años y en la Comandancia de Pontevedra lo festejaron con un sencillo y solemne acto en el que el comandante Manuel Dabó, máximo responsable del cuerpo en la provincia, explicó que algunos de los objetivos con los que se fundó en 1844 continúan vigentes hoy en día.

Dabó explicó que uno de estos objetivos que todavía deben guiar a todo guardia civil en el desempeño de sus funciones es "el respeto a la legalidad y a la autoridad política" pero "sobre todo su labor humanitaria", es decir, "el servicio al ciudadano y a la seguridad ciudadana".

De hecho, Manuel Dabó realizó un breve repaso por la historia de la Guardia Civil y explicó como, después de su creación, el cuerpo estuvo a punto de desaparecer hasta en dos ocasiones. El máximo responsable de la Guardia Civil en Pontevedra recordó como otros muchos cuerpos de seguridad ciudadana anteriores a la Benemérita desaparecieron con el paso del tiempo, pero la Guardia Civil logró perdurar. Para Dabó, esto se debe precisamente a esta labor humanitaria y de servicio al ciudadano de la Guardia Civil: "Fue una institución que se valoró y que generó un enorme cariño entre el ciudadano que recibía su ayuda". Enmarcó el nacimiento del Instituto Armado como respuesta al fenómeno del bandolerismo que asolaba España después de que muchos de los guerrilleros que luchaban contra las tropas francesas se hubieran quedado en el monte, quizá por no saber reintegrarse una vez consolidada la independencia, y realizaban numerosos actos de pillaje. En aquel escenario se creó, un cuerpo de seguridad que "nació del Ejército para no distraerlo de sus cometidos específicos". En el acto se dio lectura a los dos reales decretos por los que se creó la Guardia Civil y se entregaron las condecoraciones a los agentes distinguidos con la Cruz de la Orden del Mérito con Distintivo Blanco, concretamente el teniente Juan Antonio Gutiérrez Martín, al sargento Miguel Silva Barros, los guardia civiles Daniel Carral Miguélez, Manuel Pérez Castro, Eduardo Sánchez Martínez, y los agentes en reserva Demetrio Penabad Enríquez y el sargento Javier Sobrado Vázquez.

También se entregó un diploma a seis exguardias civiles retirados que son Manuel Veiga Gómez, Ignacio Carballal Domínguez, Ramón Gómez Rodríguez, Antonio Rodríguez Paredes y al capitán Jesús García Rodríguez.