Lo que hace años eran florecientes empresas con una nutrida nómina de empleados, la mayoría del vinculadas al sector del ladrillo, se venden hoy en piezas para satisfacer las demandas de los acreedores después de ser liquidadas por el juzgado de lo mercantil tras un proceso de acreedores fallido. Retales de muchas de estas firmas salen a subasta a través de internet, mediante una novedosa fórmula que pone un portal de subastas a disposición de los administradores concursales de tal forma que los bienes de estas firmas se entregan al mejor postor y les permite sacar el mayor rendimiento posible a lo que queda de estas empresas que han sido barridas por la crisis.

Una de las empresas que gestiona este tipo de portales de subasta, www.liquidaciondeempresas.com, tiene su base en Pontevedra y, aunque su campo de actuación es todo el territorio nacional, predominan los bienes procedentes de toda Galicia y especialmente la provincia de Pontevedra. Empresas de renombre como la catoirense Cedonosa (dedicada a los azulejos y la cerámica), la constructora Casas Novas (del expresidente de la Cámara de Comercio, Ricardo Mirón), los astilleros MCíes o algunas de las firmas del Grupo Pirsa vieron como sus bienes se iban vendiendo al mejor postor a través de esta página en internet.

Los responsables del propio portal explican en la web que su objetivo es ser una herramienta útil tanto para el público en general como para los encargados de sacar el mayor rendimiento posible a estos bienes: "Tratamos de hacer público a todo el mundo, de una forma transparente y eficaz, la venta de activos de empresas en liquidación. Creemos que tanto para el administrador concursal como para el usuario en general es una ventaja publicar y poder ofertar todos los activos que se deben de enajenar en el ámbito empresarial fruto de un concurso de acreedores", explican los responsables de www.liquidaciondeempresas.com.

Actualmente figuran más de 130 empresas en su lista de firmas con activos a subasta lo que indica el elevado número de firmas que acaban siendo liquidadas tras el concurso de acreedores.

Las cifras que manejan los juzgados de lo Mercantil de la provincia confirman que son escasas las empresas que superan con éxito el concurso de acreedores, a pesar de que este proceso se articuló en sustitución de la antigua suspensión de pagos para intentar mantener a flote aquellas entidades que atravesaban por dificultades.

Según los datos que publicó el Consejo General del Poder Judicial con respecto a las tres salas de lo Mercantil de Pontevedra (dos con sede en la capital y el tercero en Vigo) declararon en 2012 un total de 178 liquidaciones de empresas que entraron en fase concursal. Son 56 más de las que decretó en el anterior ejercicio, lo que supone un incremento del 45% con respecto a 2011. Muy lejos quedan las 26 liquidaciones de empresas que decretaban los magistrados de lo Mercantil en el año 2007.

Pontevedra es, además, la provincia gallega en la que se decreta un mayor número de liquidaciones de empresas. Las 178 empresas pontevedresas liquidadas superan a las 132 de A Coruña, a las 56 de Lugo y a las 24 de Ourense. El pasado año fue, también, el de mayor pérdida de empresas de toda la historia por esta vía del concurso de acreedores. Hasta entonces, el récord lo ostentaba el año 2010 cuando desaparecieron un total de 145 firmas.