El concello de Pontevedra pondrá a la venta a partir de mediados del próximo mes de junio más de 350 nichos ubicados en los cementerios de Pontesampaio y San Mauro. En el primer caso serán 86 los que se ofertarán y 267 en el ubicado en la ciudad del Lérez.

Los de Pontesampaio saldrán a la venta a precios entre 1.234 y 1.292 euros. Por su parte, en el cementerio de San Mauro las tasas se elevan hasta los 1.280 del más asequible y los 1.524 de los más caros.

En todos los casos las tumbas se adjudicarán por un plazo de 75 años y no podrán adquirirse más de cuatro por persona.

Podrán solicitarlos todos los pontevedreses que se hayan empadronado en el municipio al menos en el último año y una vez que el pliego de condiciones de venta se publique en el Boletín Oficial de la Provincia.

Este trámite se cumplirá en un plazo máximo de quince días y el pliego se expondrá al público durante un mes.

En el improbable caso de que hubiese más solicitudes que tumbas a la venta, el Concello establecería un sistema de priorización. Así, las mayores opciones corresponderían a las personas con más edad. "Quien tenga más de 80 años tendrá más opciones que los que tengan menos de 30", indicó a este respecto la titular del departamento municipal de Benestar Social.

Se trata de los nichos que quedaron sin adjudicar en la anterior fase de venta de espacios en los cementerios del municipio y la concejala de Benestar Social Municipal, Carmen Fouces, estima que con esta entrega la totalidad de la demanda estará cubierta.

De hecho, en la anterior campaña de venta, realizada hace cuatro años, el 80% de los nichos quedaron sin dueño, de ahí que se oferten de nuevo.

Las más de 350 tumbas a la venta son, insistió la edil, "más que suficientes para la demanda que hay y probablemente muchos de ellos volverán a quedar sin adjudicar".

Un proceso "absurdo"

Carmen Fouces calificó sencillamente de "absurdo" el proceso legal para adquirir un nicho. El proyecto del Concello de Pontevedra era que se hiciese una "venta abierta permanente", de modo que en cualquier momento los vecinos del municipio pudiesen hacerse en cualquier momento con una tumba en caso de que uno de sus allegados lo necesitase.

De hecho, el Concello de Pontevedra encargó un informe jurídico sobre este particular porque, explicó la concejala, "tenemos nichos suficientes y lo normal sería que a medida que se van necesitando se pudiesen conseguir", algo que impide la legislación vigente.