El alto de San Cibrán acoge hoy la tradicional romería del lunes de Pascua. Numerosos pontevedreses acudirán a la ermita situada en el monte de Tomeza para ahuyentar las "meigas" y el mal del ojo, con la realización de un sencillo ritual, que consiste en dar nueve vueltas a la ermita, lanzando una piedra por cada una de ellas. Son muchos los que bendicen los ramos para limpiar el hogar de embrujos, en una tradición cuyo origen se pierde en la noche de los tiempos. La romería campestre se completa con la tradicional comida en el monte y finaliza con una verbena. La tradición, cada vez más perdida, supone subir a pie los montes de esta parroquia para llegar hasta la capilla y, tras espantar el "meigallo", disfrutar allí de una comida campestre, en un ambiente festivo y animados por grupos de gaitas. Aunque todavía son muchos los que siguen disfrutando de una comida en el monte, la mayoría opta por el pulpo o el churrasco que se sirve en una carpa instalada al lado de la capilla. El coche particular está sustituyendo también la peregrinación a pie.