Alrededor de 1.250 vecinos de Pontevedra, según las estimaciones del concello, subsisten con menos de 400 euros mensuales. Se trata de personas beneficiarias de pensiones no contributivas que habían mostrado su temor a que finalmente se cumpliese el anuncio de la Xunta y se les retirase el complemento autonómico de 200 euros que venían percibiendo.

Tras la fuerte polémica generada, el presidente de la Xunta anunció ayer que estas ayudas se mantendrían e incluso se incrementarían, una "marcha atrás" que los afectados exigen "que se demuestre realmente en la práctica".

Estos vecinos beneficiarios de ese tipo de pensiones no contributivas (cuyo perfil mayoritario es el de una persona de la tercera edad y/o discapacitado) perciben al mes entre 336,33 y 149,86 euros, dependiendo del tipo de pensión.

Se trata de economías muy precarias para las que un recorte de 200 euros euros anuales hubiese supuesto "un gran impacto, el equivalente a una paga", criticó la concejala de Benestar Social, Margarita Castejón.

Ésta denunció que el recorte anunciado el pasado martes por la Consellería de Familia e Benestar Social y corregido ayer por el presidente de la Xunta es un hecho sin precedentes, "una medida terriblemente insolidaria que afecta sobre todo a mujeres, casi el 70% del total, de edad avanzada que en su día no pudieron trabajar", personas que a partir de 2010 pasarían a ser "aún más pobres", añadió.

Especialmente, la responsable del área de Benestar Social mostró su malestar por las palabras de la secretaria xeral de Familia, Susana López Abella, "que se atrevió a minimizar lo que suponen para estas familias esos 200 euros diciendo que son sólo 50 céntimos diarios; pues en estos casos esos 50 céntimos son casi una barra de pan, un hecho que no se advierte a otros niveles de ingresos, claro", ironizó en alusión a los salarios de los altos cargos de la Xunta.

De hecho, recordó que la reducción del 3% en los salarios de los altos cargos no tiene el mismo impacto que recortar fondos en las economías precarias y aseguró que "el secretario xeral de Emigración cobra un 66% más que sus precedentes, aquí se recorta pero sólo a los sectores sociales más débiles".

En el municipio de Pontevedra 1.196 personas cobran pensiones no contributivas por jubilación (un total de 515, de ellos 413 mujeres y 102 varones) e invalidez (681, que perciben 412 féminas y 269 varones).

A mayores, se suman los perceptores de Lismi (para la integración social de minusválidos) y el Fondo de Asistencia Social, de modo que el concello estima que en toral serán unos 1.250 personas las que verían mermados sus recursos si se eliminase finalmente el complemento.