Las lluvias registradas durante la jornada de ayer provocaron varios accidentes en diferentes carreteras de la comarca con heridos de diversa consideración. Las estaciones meteorológicas registraron cantidades que oscilaron entre los 34,6 litros por metro cuadrado de Lourizán, los 36,2 de Sanxenxo o los 25,6 de Caldas de Reis.

Las precipitaciones provocaron la acumulación de pequeñas bolsas de agua y el desbordamiento de alcantarillas en los municipios de la comarca, así como en la capital, pero no hubo que lamentar grandes consecuencias. Asimismo, a lo largo de la jornada se registraron varios accidentes de tráfico. El de mayor gravedad se produjo en la Avenida da Toxa, en Raxó, a las 17.40 horas y se saldó con una mujer herida grave.

La víctima conducía por la PO-308 en dirección a Sanxenxo cuando, a la altura de la gasolinera de esta localidad perdió el control del vehículo por razones que se desconocen y acabó colisionando contra una casa ubicada en el margen de la carretera.

Según testimonios presenciales, la mujer salió de una curva dando bandazos y llegó a cruzar con su automóvil todo el carril contrario para acabar impactando con el muro del inmueble. "Afortunadamente o mozo que viña de frente dou parado a tempo senón as consecuencias aínda podían ter sido peores", manifestaban.

El 112 Emerxencias recibió el aviso de un particular que alertó de que la conductora había quedado atrapada. Por ello, desplazó hasta el lugar a efectivos de Protección Civil de Sanxenxo y Bomberos de Pontevedra, aunque finalmente no fue necesaria su intervención. El fuerte impacto provocó que el lateral izquierdo del coche quedara prácticamente aplastado, lo que dificultó la apertura de la puerta de la conductora, pero la mujer no quedó atrapada..

Una ambulancia del 061 fue la encargada de trasladar a la víctima a un centro hospitalario, que según testigos presenciales permaneció inconsciente durante más de diez minutos.

Umia

En la carretera de Cuntis a Moraña se produjeron dos accidentes consecutivos a consecuencia del agua. En el primero de ellos un vehículo se salió de la vía por un desnivel. El estado en que quedó el turismo hizo difícil sacar al ocupante, que no sufrió daños de gravedad. Poco después se producía en la misma vía un nuevo siniestro, también a consecuencia del deslizamiento de un vehículo sobre el agua acumulado en la calzada, ocasionando la colixión de otros dos automóviles. Este siniestro tuvo como consecuencia dos heridos, trasladados a hospitales de Pontevedra.

También la carretera N-550 a su paso por Caldas se produjo una salida de vía de un camión de transporte de aves, que quedó volcado sobre la carretera obstaculizando uno de los carriles de circulación. El conductor no resultó herido de gravedad.

Otra salida de vía se produjo en la carretera de O Pousadoiro, con un herido, que también complicó la circulación en la tarde de ayer en esta vía.