La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra celebrará el próximo día 12 de noviembre el juicio por un caso que dio mucho que hablar durante la celebración de la Feira Franca de 2008, ya que los hechos se produjeron en los días previos a esta celebración. Se trata de la vista contra Francisco P. V., de 42 años, quien supuestamente intentó prender fuego a un bar de la calle Barón con cerca de una veintena de personas en su interior.

La Fiscalía de la Audiencia Provincial de Pontevedra solicita una pena de 5 años de prisión para esta persona, a quien le imputa un delito de intento de incendio. Según la versión que defenderá el Ministerio Público durante la vista, sobre la medianoche del 5 de septiembre de 2008, el acusado, Francisco P.V., salió del entonces denominado bar "Shogun", que se encontraba en la calle Barón, en donde acababa de increpar al titular del establecimiento y cuñado del propio procesado. Supuestamente, le insultó diciéndole "hijo de puta" y "payaso".

Gasolinera de O Burgo

Según el fiscal, Francisco P.V., tras abandonar el establecimiento hostelero, se dirigió hacia la estación de servicio de O Burgo, en la que adquirió dos litros de gasolina en una bolsa especial con capacidad para ocho litros.

Presuntamente, el acusado se dirigió con esta bolsa de nuevo al bar "Shogun" con "ánimo de incendiar el local", dice el escrito de acusación, intención que Francisco P. V. le comunicó poco antes a su propia esposa, quien trató de disuadirlo.

Pese a los intentos de su esposa por evitarlo, asegura el fiscal que sobre la una de la madrugada Francisco P. V. penetró en el bar "Shogun" cuando todavía se encontraba abierto al público y supuestamente "comenzó a rociar con la gasolina que portaba el suelo del local, salpicando a varios clientes allí presentes, y, sacando un mechero, quiso encenderlo con la intención de prender el líquido inflamable".

El representante del Ministerio Público explica que fue el dueño del establecimiento, así como varios de los clientes que se encontraban en el interior del local, quienes al ver esta acción se abalanzaron sobre el procesado e impidieron que prendiera fuego al combustible.

Casi al mismo tiempo irrumpieron en el local tres policías locales de Pontevedra, quienes previamente habían sido alertados por la esposa de Francisco P. V. de las intenciones de su marido de quemar el bar. La mujer supuestamente acudió a pedir ayuda a los policías al ver que no pudo convencer a su marido de que no regresara al local. Tras ser puesto a disposición judicial, un magistrado pontevedrés ordenó entonces su ingreso en prisión preventiva.

Los agentes municipales observaron como, en el momento en el que entraban en el bar, el acusado arrojaba al suelo su mechero, procediendo de inmediato a su detención.

El dueño del establecimiento, renunció al ejercicio de acciones civiles y penales contra el acusado, su cuñado, según se recoge en el escrito de acusación del fiscal.

El procesado, así como los testigos y los diferentes juicios que declararán ante el juez están citados en la Audiencia de Pontevedra el 12 de noviembre a las 10.15 horas.