Los vecinos del cuartel de Figueirido volvieron ayer a manifestar su indignación por las actividades que la Brilat está realizando en el perímetro de la base militar. Si al principio fue la franja de seguridad y posteriormente las obras para crear un decorado bélico, donde ensayar su intervención en Afganistán, ahora los vecinos han denunciado los grandes desmontes que se están realizando en el terreno y que -según explicaron los portavoces vecinales- están dañando de forma irreversible el hábitat natural de los montes de San Martiño.

Los residentes siguen vigilando la zona de obras, donde los trabajos han continuado después de un parón de dos días, para descubrir en la tarde de ayer una gran extensión de terreno devastado por las máquinas excavadoras. "Isto é unha ruina para a parroquia, actúan peor que con Franco", manifestó un vecino tras la inspección a la zona.

A pesar de este nuevo agravio a la parroquia, los vecinos están dispuestos a reconducir su protesta, ofreciendo una oportunidad a la negociación con el Ministerio de Defensa, a consecuencia de los violentos enfrentamientos del pasado lunes ante el cuartel.

Los portavoces vecinales se muestran partidarios del diálogo, a pesar del nuevo revés sufrido ayer al comprobar de qué manera el Ejército continúa alterando el ecosistema en los montes de la parroquia. Hoy se reunirán para detallar esta nueva estrategia de la campaña contra las actuaciones de la Brilat en la zona.

Por otra parte, los afectados siguen esperando la respuesta oficial del Ministerio de Defensa a sus reivindicaciones y un compromiso por escrito a modificar la franja de seguridad para excluir de la misma a todas las viviendas.