m. Fontán  Vigo

Maximino Couto Durán, el preso pontevedrés de 60 años que mató a su actual pareja en Ponte Caldelas e hirió de gravedad a un matrimonio y a un policía nacional en Mourente (Pontevedra), disfrutaba de un permiso penitenciario pese a que en una anterior salida de la cárcel de A Lama, en marzo de este mismo año, fue detenido por quebrantar la orden de alejamiento que tenía con respecto a su ex mujer, a la que el sábado también fue a buscar, armado con un cuchillo, sin encontrarla.

El agresor, que hoy por la mañana pasará a disposición judicial en Pontevedra, comenzó en mayo de 2006 a cumplir una condena de dos años y siete meses de cárcel por amenazar de muerte a su ex esposa, Herminia Buceta. La pena también llevaba aparejada una orden de alejamiento hacia la mujer y su hijo, por lo que en los permisos penitenciarios salía equipado con un dispositivo GPS en forma de pulsera que permitía conocer si se acercaba a la denominada zona de exclusión en la que tiene su vivienda la víctima.

El instrumento dio la alerta el pasado 3 de marzo. El dispositivo detectó que había incumplido su orden de alejamiento en varias ocasiones y que hizo caso omiso de los mensajes que se le enviaban a su unidad de localización para advertirle de que estaba en una zona restringida, en los alrededores del domicilio que su anterior compañera tiene en Mourente. La Policía Nacional detectó la infracción y dio aviso a la Guardia Civil, que procedió a la detención de Maximino en su domicilio de Ponte Caldelas, el mismo donde este sábado ponía fin a la vida de su pareja María del Rosario Peso, de 57 años. Tras el arresto, fue reintegrado a prisión.

Con respecto a este quebrantamiento de la orden de alejamiento -la ex compañera asegura que a mayores se lo encontró cerca de su casa también en otras ocasiones-, Instituciones Penitenciarias alega que se "pudo comprobar" que no iba a junto de su antigua esposa, sino que se dirigía a la parroquia de Mourente para arreglar los trámites "de un alquiler". En este sentido, asegura que Maximino iba ese día acompañado de su actual compañera y que el GPS saltó porque la zona de exclusión que tenía asignada "era muy amplia". "La cárcel, tras esta detención, le denegó el siguiente permiso; él recurrió al juez de Vigilancia Penitenciaria que comprobó, igual que el fiscal, que no se había acercado a su ex mujer, por lo que le concedieron la salida", justifican las mismas fuentes.

Este último permiso penitenciario, en el que se desencadenó la tragedia, fue propuesto de nuevo por la prisión y autorizado posteriormente por el magistrado. Con respecto a esta salida de cuatro días, tanto Instituciones Penitenciarias como el director de A Lama, José Antonio Gómez Novoa (en este caso en declaraciones a la Cadena Ser), incidieron en que se le otorgó porque su conducta "estaba normalizada" y "como preparación para su vida en libertad", ya que el 19 de diciembre saldría definitivamente de la cárcel. Dijeron que adoptaron todas las medidas establecidas para estos permiso, como el GPS o la comunicación de la salida a las fuerzas de seguridad.

Lo más dramático del caso, según estas fuentes, es que la propia fallecida, que visitaba con frecuencia al agresor en la cárcel y tenía una buena relación con él, estuvo con el director de la prisión el pasado martes para pedir que le otorgaran ese permiso. "Me suplicaba que le diera el tercer grado a su pareja e incluso incidía en que había una persecución hacia su compañero para no dárselo", dijo Novoa. Incluso les garantizaba que Maximino no se acercaría a su ex compañera.

Heridos

Y mientras tanto, el matrimonio y el agente heridos por este pontevedrés el sábado siguen hospitalizados. El estado de la pareja, que está en el Hospital Montecelo, es estable dentro de la gravedad: José P.P. presenta 3 heridas por arma blanca que afectaron a pulmón, hígado y hombro, una de 20 centímetros, y Concepción C.A. tiene dos puñaladas. El policía se encuentra menos grave en el Domínguez.