El plan anticrisis aprobado ayer por el Gobierno central y que reserva un fondo de 8.000 millones de euros para inversiones municipales con el fin de reactivar la economía, asigna para el concello pontevedrés una partida de 14,2 millones, a razón de 177 euros por cada uno de los 80.202 habitantes oficiales del municipio. El gobierno local trabaja desde ayer mismo en la selección de los posibles proyectos que accedan a estas ayudas, toda vez que el plazo para garantizar estos fondos concluye en menos de dos meses, el próximo 20 de enero.

Esa cifra de 14,2 millones de euros es la que maneja, de forma provisional, el equipo municipal, a la espera de obtener toda la información oficial de este decreto estatal. Además, también dependerá de las condiciones concretas la selección de las posibles obras aceptadas. En todo caso, ya se elabora un amplio listado de opciones, dentro de las negociaciones al respecto que deben realizar el BNG y el PSOE, según admitió ayer el concejal de Infraestructuras, César Mosquera.

El decreto impulsado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, señala que estos 14,2 millones de euros se destinarán a la "realización de actuaciones urgentes en materia de inversiones especialmente generadoras de empleo". Además, se establece un marco de actuación, que incluye obras de (adecuación, rehabilitación o mejora de entornos o espacios públicos urbanos, así como de promoción industrial, y los equipamientos e infraestructuras de servicios básicos en las redes vicarias, de saneamiento, alumbrado y telecomunicaciones". Ambos capítulos encajan casi de forma perfecta en los planes de reforma urbana que el concello tiene en marcha en calles como Porreiro Crespo, Joaquín Costa o A Estrada, por ejemplo, que superan ya un presupuesto de ocho millones de euros. También servirían los planes de saneamiento del rural.

Asimismo, serán subvencionabais proyectos de "construcción, adecuación, rehabilitación o mejora de edificios y equipamientos sociales, sanitarios, educativos, culturales y deportivos", junto con las "dirigidas a la protección del medio ambiente y la prevención de la contaminación". En este último aspecto, se bajara incluir la propuesta de recuperación ambiental y paisajístico de la Illa das Esculturas.

La supresión de barreras arquitectónicas es otro de los capítulos a los que se podría incorporar el concello para proyectos como la remodelación de la Casa Consistorial, mientras que actuaciones en el casco viejo, como el Museo da Historia da Cidade, se integran en el apartado de "conservación del patrimonio histórico del municipio".

Mejoras de seguridad vial, promoción del turismo y prevención de incendios son otras actuaciones seleccionadas por el Gobierno central y en las que existen previsiones municipales al respecto, como el programa "Monte Vivo", la remodelación de la PO-12 (el primer tramo de la avenida de Marín).

Al margen de las actuaciones concretas que se puedan incorporar al plan "anticrisis" de Zapatero y la inversión definitiva, el gobierno local se congratuló ayer de que el Gobierno central (se sume al club" de las administraciones que adoptan estas medidas. El concejal de Hacienda, Raimundo González Carballo quiso subrayar ayer que "estas propuestas son muy similares a las aprobadas hace unas semanas por el concello, ya que se basan en el concepto que defendimos aquí de incrementar las inversiones públicas para generar empleo".

En todo caso, el concello pretende despejar "ciertas dudas" que aún se derivan del plan conocido ayer, "como la tipología exacta de las obras" y, sobre todo, "los plazos, que vemos muy ajustados". Así, el concello deberá presentar sus solicitudes entre el 10 de diciembre y el 20 de enero), cumpliendo requisitos como aportar una memoria explicativa de cada proyecto, su presupuesto y plazo de adjudicación, el número de personas a ocupar (que deben proceder de las listas del paro) y una certificación de que la obra no figurará en el Presupuesto municipal de 2009. Además, habrá que comenzar las obras entre el 11 de enero y el 13 de abril y estar totalmente certificadas (es decir, acabadas) en el primer trimestre de 2010.