La carretera nacional 554, pendiente de mejora desde hace años, ha sido escenario en Vilaboa de un nuevo accidente de tráfico, en el que dos mujeres, de 26 y 27 años, resultaron heridas. Este vial, que sirve de alternativa a la autopista, y donde se multiplicó el tráfico desde que se aplicó la gratuidad en el puente de Rande, ha disparado su siniestralidad.

En esta ocasión, el accidente se produjo pasadas las 23,30 horas del pasado sábado en la zona de Acuña, muy cerca del cruce con la N-550. Hasta el lugar tuvieron que acudir efectivos de Protección Civil de Vilaboa y de los Bomberos de Pontevedra, para rescatar a una de las heridas.

La Guardia Civil de Tráfico explicó que fue una colisión lateral entre un Opel Tigra y un Skoda Octavia. El primero lo conducía R. R. C, de 27 años, que viajaba sola y fue la que hubo que rescatar. El segundo vehículo lo ocupaba la conductora (M. L. L. A, de 26 años y herida) y dos mujeres más: E. M. G. L., de 25 años, y S. A. R, de 22. Según la Guardia Civil, ambas resultaron ilesas.

El deficiente estado de la N-554, pese al elevado tráfico que soporta, ha generado el malestar de los vecinos, que exigen al Ministerio de Fomento que ejecute de una vez un proyecto de mejora que tiene paralizado desde hace meses.

Además de este siniestro, a lo largo de la jornada de ayer hubo accidentes en Poio, Caldas, Pontevedra y Marín, en algún caso ocasionados por la lluvia, que dificultaba la circulación. La colisión de Poio se produjo a las 17,20 horas en la PO-308 a su paso por San Salvador, con un Audi y un Mercedes implicados, según informó la Policía Local.

A su vez, en Marín hubo otro siniestro en la calle Calvo Sotelo, a las 15,40 horas, mientras que en Pontevedra se registraron dos casos más, pasadas las 12,30 horas y poco antes de las 17.00 horas, en ambos casos sin consecuencias.

Según el servicio de emergencias 112, también en Pontevedra fue necesario actuar dos veces en la carretera de Campo Lameiro para limpiar una mancha de gasoil que complicaba aún más la circulación por la zona. Algo parecido ocurrió a las cinco y media de la tarde en Caldas, donde hubo que limpiar una macha de aceite.

Los Bomberos también acudieron, hacia las 19,30 horas, a un edificio de la avenida del Uruguay de Pontevedra para atender una llamada porque "salía humo de un edificio", pero finalmente se trató de una falta alarma, supuestamente por el encendido de una caldera. En otras salidas, retiraron sendos árboles en peligro de caer en las parroquias de Canicouva y de Marcón.