Julio Santos Pena / MARÍN

Botes", el lobo marino que fue recogido el 11 de enero en la playa de Botes en Valdoviño (A Coruña) fue embarcado ayer en el buque "Ferreira Martínez", que lo devolverá a su medio natural en alta mar. El mamífero marino, que fuera recogido en precarias condiciones de salud, escaso de peso y con heridas considerables, fue atendido durante dos meses por técnicos de la Coordinadora para el Estudio de Mamíferos Marinos (Cemma) que en primer lugar lo trasladaron a la unidad de cuidados intensivos de la Sociedade Galega de Historia Natural de Ferrol y, posteriormente, al acuario de O Grove donde permaneció desde el día 2 de febrero.

El lobo marino fue operado de una afección subcutánea en la cabeza, y tras ser debidamente nutrido y rehidratado, llegó a su estado normal con unos cincuenta kilos de peso, por lo que se decidió la reintegración al medio marino.

Viaje en arrastrero

Los marineros del arrastrero "Ferreira Martínez" recibieron con curiosidad a "Botes", aunque ya no es la primera vez que colaboran con este tipo de actuaciones, portado en una cesta de mimbre que fue embarcada por la mañana hacia alta mar donde fue soltada horas más tarde, en busca de su medio natural con la esperanza de los técnicos de Cemma que la operación sea exitosa ya que ni en éste ni en los casos anteriores se hace un seguimiento de sus evoluciones.

El "Ferreira Martínez" ha trasportado en ocasiones anteriores a otros mamíferos que pasaron por similares circunstancias y tras sus respectivas recuperaciones también fueron devueltos a su medio natural como el caso de otra foca de nombre "Fenicio" que, tras convivir en el acuario con "Botes" fue devuelta al mar hace pocas semanas por similar sistema.