La "bomba vírica" del coronavirus aumenta su diámetro de expansión saltando de la ciudad a diferentes puntos de la provincia. La situación epidemiológica del coronavirus está peor que nunca. El área sanitaria de Ourense, Verín y O Barco alcanza el valor más alto de contagios activos de toda la pandemia, al registrar 1.351 personas que tienen el virus en estos momentos. Para acercarse a ese valor hay que remontarse al 28 de abril cuando se contabilizaban 1.325 casos activos que era el mayor pico hasta la fecha.

La propagación del virus continúa en expansión y fulmina otra estadística histórica de estos seis meses de pandemia al registrar también el valor más alto de contagios diarios detectados que se alzan a los 239 positivos. Dos guarismos que indican que la situación epidemiológica en Ourense, lejos de frenarse, va en aumento y radiografía la incidencia del virus gracias a la capacidad de detección de casos, al realizar un mayor número de pruebas PCR entre la sociedad ourensana.

La capital decelera el crecimiento del último mes y solamente registró ayer un caso, contabilizando 537, según informaron las autoridades sanitarias.

El confinamiento conjunto de Ourense y Barbadás cumple hoy su tercer día de vigencia y ayer el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ratificó las medidas impuestas por el gobierno gallego, después de que el órgano homólogo de la Comunidad de Madrid tumbara el confinamiento de algunas ciudades. Al respecto el máximo órgano judicial de Galicia, entiende que "resulta que las medidas solicitadas son idóneas para la prevención y protección de la salud de la población a la que van destinadas; necesarias, dada la constatación de una situación de peligro actual y real para la salud de los ciudadanos; y proporcionadas, ponderando los diferentes intereses en conflicto".

Situación en Os Gozos

La "bomba vírica" ya afecta a residencias de mayores y la detección de 112 casos en residentes y 25 entre el personal de la Residencia Os Gozos en Pereiro de Aguiar obliga a la Xunta de Galicia a intervenir la residencia para "garantizar la calidad asistencial después del aumento de casos positivos por coronavirus en el centro". Ayer, un equipo de profesionales se desplazó al geriátrico para hacer un seguimiento médico de los usuarios positivos, así como para vigilar la adecuada aplicación de los protocolos. El gobierno gallego, a través de la Consellería de Política Social, enviará una comisión de profesionales que hará una auditoria para conocer la situación de la residencia con el objetivo de determinar el alcance de la intervención pública. La Fundación San Rosendo ya contactó con los trabajadores que están en una bolsa de empleo del patronato que se hicieron las pruebas precisas para empezar a trabajar y están a la espera de resultados para incorporarse a la plantilla que está sectorizada por plantas según sean los pacientes negativos, negativos con contactos, negativos convivientes con positivos o positivos. La mayoría de los casos de este centro asintomáticos y hay cinco personas que fueron trasladadas al hospital ourensano por su cuadro de salud.

La propagación del virus también afecta a la Residencia de la Tercera Edad de Esgos donde están a la espera de un cribado después de que una trabajadora diera positivo. El virus vuelve a atacar, indistintamente, a los geriátricos ourensanos que ya registran los dos mayores brotes de la comunidad gallega en residencias en toda la pandemia.

A última hora de ayer, se producían dos muertes más en la provincia. Dos mujeres de 91 y 62 años que fallecieron en O Barco y en el CHUO, respectivamente. Las muertes ya contabilizan 30 bajas durante la segunda ola de la pandemia.

Las autoridades reiteran con esperanza el mensaje de prevención y el cumplimiento de las normas ante la entrada de un puente festivo. Responsabilidad individual. No es un juego. El virus mata.