El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, el único regidor de España que sigue gobernando con solo dos concejales de los 27 que tiene esta corporación local -él mismo y otro edil de su grupo- se enfrenta hoy al pleno municipal crucial, pues es el de toma de posesión del edil de su partido, Democracia Ourensana, Telmo Ucha.

El futuro concejal ratifico a FARO que será hoy -después del pleno, y de la toma de posesión del escaño que quedó libre, tras la renuncia de uno de los 5 ediles críticos con Jácome -cuando hará público si se sienta en las filas de DO, o pasa al grupo de no adscritos. Su decisión puede cambiar los tiempos del insólito gobierno de Ourense.

Si pasa al grupo de no adscritos, facilitaría una posible moción de censura contra el alcalde, que de acuerdo a una de las combinaciones posibles, incluso haría innecesarios los votos del PP y los de los cuatro ediles díscolos de DO que denunciaron a Jácome en Fiscalía y acordaron su expulsión del grupo.

El PSOE, revuelto

En el supuesto de que Ucha apoye en los próximos días una moción, bastaría con sumar el voto de no adscrito, a los 9 de PSOE, el partido más votado, 2 de Ciudadanos (grupo que ya podría estar dividido sobre qué opción tomar) y 2 del BNG. Con estos habría una mayoría de escaños suficientes para cambiar el sino del convulso gobierno de Ourense

La otra solución de urgencia, sobre la que no quiso pronunciarse ayer el presidente de la Diputación, Manuel Baltar, alegando que eran los grupos políticos los que debían reunirse (como si él no fuera el mando máximo del PP en la provincia), consistiría en sumar los 7 ediles del PP a los 9 del PSOE. Una solución lógica, pero que indigesta a ambas formaciones. El PP no parece dispuesto a encumbrar por las buenas a la Alcaldía de As Burgas al presidente del grupo socialista, Rafael Villarino, persona "non grata" para los populares y en especial para Baltar, por su acerado estilo de oposición y por sacar a la luz supuestas ilegalidades en el reparto de las ayudas a autónomos que hizo el pazo provincial. Una crítica que tuvo en jaque durante semanas con continuas críticas a Villarino, al PP, gallego, local y nacional.

Por otro lado una buena parte del PSOE se niega a ese pacto con el PP de Baltar, por cuestiones ideológicas, no pactar con el heredero de una saga, y lo que es peor, porque una parte del PSOE no quiere que Rafael Villarino sea alcalde. De hecho 5 de sus 9 ediles son la oposición a Villarino dentro del grupo

A río revuelto en los partidos, más se alarga la fecha de caducidad de Jácome en la Alcaldía. Un alcalde con un gobierno pírrico, pero que no pierde y no desaprovecha el tiempo y pese a estar acorralado con investigaciones y/o denuncias por la vía tributaria, en el juzgado y en Fiscalía sigue anunciando proyectos municipales , y aumentado el número de parados en el municipio, pues cesó ya por decreto este lunes a los 10 asesores del PP, que rompió el pacto de Gobierno con el partido de Jácome, tras las graves acusaciones de irregularidades contables que le hicieron los díscolos al alcalde y la denuncia de que el regidor pedía fuertes mordidas de su sueldo a sus asesores. Tampoco se olvidó de ratificar ayer el cese de Manuel Álvarez, uno de los ediles díscolos de DO, como vicepresidente del partido, que este ya ha recurrido.

En medio de una crisis sin precedentes en el Concello, Jácome que dice coleccionar chistes, opta por la ironía o por el humor negro en sus redes, donde ayer afirmabaque "hoy despediré de forma fulminante, al responsable del "casting" de la lista electoral de DO", es decir, a él mismo.