La evolución de la pandemia en Ourense sigue su escalada muy marcada por los brotes de carácter familiar y muy concentrada en la capital de As Burgas, donde la Xunta ha ampliado las restricciones para cortar la transmisión del virus.
Son 459 los casos activos de Covid-19, tras sumar en las últimas 24 horas 34 nuevos contagios y cuatro altas, lo que suma 30 pacientes más. Del total, 423 están aislados en su domicilio y bajo seguimiento del personal sanitario, mientras que 36 requieren hospitalización, con cinco enfermos en la Unidad de Cuidados Intensivos. Todos los pacientes están en el Hospital Universitario de Ourense, HUO, excepto uno, que se encuentra en el de Verín.
Además, Sanidade notificó ayer un nuevo brote en Verín que afecta a tres jóvenes de 22, 26 y 27 años. Por otro lado, el foco de Mariñamansa asciende a 31 contagios tras la detección de un nuevo caso, el de una mujer de 75 años. El brote Riós y Castrelo do Val asciende a 13 casos activos tras sumar dos contagios: un hombre de 60 años y un menor. Finalmente, el foco detectado en A Rúa se sitúa en 10 afectados tras el positivo de un hombre de 43 años.
Desde el inicio de la pandemia se han contagiado en la provincia 2.667 personas, y 2.073 superaron la enfermedad. La cifra de fallecimientos se mantiene en 135, con tres muertes registradas en esta segunda ola.
La realización de pruebas diagnósticas se ha intensificado en esta segunda ola con el objetivo de detectar asintomáticos y potencias así la detección precoz de la enfermedad. En la última jornada se realizaron 449 PCRs. Desde el inicio de la pandemia se contabilizan un total de 46.704.
