El área sanitaria de Ourense sumó ayer doce nuevos positivos en coronavirus que elevan a 157 los casos actualmente activos. La curva se ha disparado en la última semana pero, reiteran desde el Sergas, la mayoría son asintomáticos o sintomáticos leves, un perfil que durante la fase aguda de la pandemia apenas se llegaba a diagnosticar.

No obstante, en las últimas horas han repuntado los casos que precisan hospitalización y en un solo día uno de los pacientes que estaba en planta ha sido derivado a la Unidad de Cuidados Intensivos, UCI, y otros tres que estaban aislados en sus domicilios han tenido que ingresar por un empeoramiento de su cuadro clínico.

De esta manera pasan a ser seis los pacientes en la planta de hospitalización Covid del CHUO y uno en la UCI. Ricardo Fernández, jefe de la sección de Infecciosos advierte a la población de que "estamos en tiempos difíciles" y anima a "no olvidar lo que ocurrió durante la grave pandemia". Habla abiertamente de "segunda ola", aunque señala que "no sabemos con qué rapidez va a crecer, si va a ser más escalonada que la primera, cual será su intensidad, a cuánta gente va a afectar o cuanto durará".

Lo que sí está claro, alerta, "es que si aumenta va a afectar a los mayores", un colectivo muy vulnerable a este virus y que ya ha pagado un precio muy alto en la primera fase. Pero aunque la evolución en las personas jóvenes es, por lo general, mejor, el facultativo advierte de que "también pueden empeorar y acabar en la UCI, o transmitir la enfermedad a sus familiares ascendentes, padres y abuelos".

Entre los pacientes actualmente ingresados en la planta Covid hay tres personas mayores (82, 82 y 98 años) y tres personas jóvenes (42, 42 y 24). El más joven, que ingresó durante la tarde del miércoles, no presenta patologías previas. Al inicio presentaba una clínica leve pero empezó a notar fatiga para respirar por lo que se hizo necesario su ingreso, y se encuentra estable.

El facultativo describe que esta epidemia funciona como una pirámide. En la base están los asintomáticos o con síntomas leves que son tratados con antiinflamatorios o parecetamol, y que permanecen en su domicilio cuando se diagnostican. En este momento, hay 150 personas en esta situación en Ourense. En el segundo escalón están las personas con síntomas más graves, que ingresan en el hospital. Seis en el CHUO. La neumonía es la causa principal de estos ingresos, aunque pueden darse otras complicaciones, precisa Ricardo Fernández, a nivel gastrointestinal con diarreas, o neurológico con problemas como la encefalitis, así como de trombosis o alteraciones de la coagulación. "Pero son más infrecuentes, la mayoría ingresan por neumonía", apunta. En el tercer escalón están los que evolucionan mal y son derivados a la UCI, como es el caso del paciente que ingresó este miércoles.

Ante las cifras ascendentes y la proximidad del otoño, el jefe de la sección de Infecciosos incide en la importancia de evitar que las cifras sigan creciendo y para ello es fundamental que se cumplan las normas. "Parece lo más elemental, pero es lo que está fallando", indica en referencia al aumento de los brotes de origen familiar.

Hace también un llamamiento a la vacunación de la gripe entre todo el personal sanitario y los colectivos de riesgo: "Nadie quiere volver a vivir lo que vivimos los sanitarios, pero para eso necesitamos el apoyo de la población", concluye.