La localidad de Laza recibió esta semana la visita de representantes de la Asociación Galega de Custodia del Territorio invitados por la CMVMC de Laza, Cimadevila y Souteliño, con objeto de conocer las zonas del monte con mayor interés para la conservación de la biodiversidad, de cara a la posibilidad de establecer un acuerdo de custodia del territorio entre ambas partes.

Con anterioridad la comunidad invitó a un técnico de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, quien les adelantó las posibilidades de la custodia del territorio, un herramienta basada en acuerdos voluntarios que ya es empleada con éxito por varias comunidades gallegas, y recogida en la ley 42/2007 del Patrimonio Natural y la Biodiversidad.

La CMVMC de Laza, Cimadevila y Souteliño cuenta con un total de 2.451 hectáreas, siendo una parte significativa de la cuenca del río Támega, la cual forma parte de la Red Natura 2000, delimita el propio monte en varias zonas y constituye un corredor ecológico fundamental en el municipio. Una de sus prioridades es la recuperación y ampliación del bosque autóctono de galería en todos los arroyos afluentes del Támega, destacando el cañón del río Cabras, uno de los parajes que la AGCT también ha señalado como estratégico.

Las medidas de restauración, prevención y lucha contra los incendios forestales marcan a esta comunidad. Durante las dos últimas décadas han recuperado más de 800 hectáreas de zonas destruidas por incendios, y han habilitado charcas y pequeños embalses para cargar moto bombas y medios aéreos.

Así, ambas partes acordaron seguir estudiando las posibilidades de mejora ambiental de este monte, principalmente de orientación productiva pero que por su situación estratégica en el Macizo Central Ourensano puede tener gran importancia para la conservación de distintas especies amenazadas en Galicia.