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La depuradora para alertar de brotes y test masivos a policías

El Gobierno elige la EDAR de Reza para un control de las aguas residuales como indicador epidemiológico ante posibles rebrotes

La enfermera María Gómez, una de las encargadas de hacer los test. // Brais Lorenzo

El Gobierno central llevará a cabo un control de las aguas residuales como indicador epidemiológico de alerta temprana de propagación del coronavirus, para lo que ha seleccionado, entre otras, la estación depuradora de aguas residuales de Reza, en Ourense, como uno de los puntos de alerta de posibles rebrotes de Covid-19. La recogida de muestras comienza la próxima semana. En toda España, en 30 depuradoras de aguas residuales urbanas y 10 zonas de baño se realizarán de forma periódica en los próximos meses muestreos para analizar la concentración de los restos de virus existente en el agua como alerta ante posibles rebrotes.

El sistema denominado VATar-COVID-19 contribuirá a identificar la presencia de personas infectadas por el nuevo coronavirus a través de las aguas residuales de la depuradora de la población. Para ello se determina la presencia de fragmentos del ARN del SARSCoV-2 (el virus causante de covid-19) en las aguas de entrada a la depuradora. Como complemento a este trabajo, se va a analizar el mismo indicador en algunas zonas de baño de aguas continentales.

Los análisis de muestras se realizarán en laboratorios de investigación de universidades y del CSIC. Las depuradoras de aguas residuales urbanas, como la EDAR de Ourense, se han seleccionado atendiendo a criterios de movilidad e interconexión entre poblaciones, mayor afluencia de turismo, poblaciones favorables a la expansión rápida de la enfermedad, así como el impacto de la enfermedad o la climatología.

Citados en parejas desde primera hora cada cinco minutos, unos 70 agentes de la Policía Local de Ourense acudieron ayer al laboratorio de análisis del Santa María Nai, en el complejo hospitalario CHUO, para someterse al test rápido que determina la presencia de anticuerpos de coronavirus y si la persona ha tenido la enfermedad. El 95% de la plantilla de seguridad municipal se había inscrito para hacer la prueba, en virtud de un convenio entre la Federación Galega de Municipios y Provincias (Fegamp) y el Sergas. Finalmente no acudieron todos. Fuentes del cuerpo calculan que unos 70, contando los superiores, realizaron ayer el test. El balance de positivos, si es que se ha registrado alguno -con anterioridad, desde el inicio de la pandemia se habían confirmado dos con sintomatología leve- no se conoce. La concejala de Seguridad Ciudadana, María Fernández Dibuja, decía ayer al respecto que "el resultado solo podría comunicarlo cada uno de manera voluntaria".

Los análisis a los agentes de la Policía Local comenzaron a las 8.30 horas de la mañana y se prolongaron hasta las 13. También acudieron ayer al hospital Santa María Nai unos 40 efectivos de la Guardia Civil. Según fuentes del instituto armado, con anterioridad ya había acudido un grupo, hace unos quince días. En estas dos últimas ocasiones "nadie ha dado positivo", aseguran desde la Comandancia.

El protocolo en estos casos para rastrear la incidencia de coronavirus entre profesionales esenciales, como son los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado -también se ha analizado en fechas anteriores a trabajadores forestales-, establece primero un test rápido. En caso de positivo, el resultado se contrasta con la prueba PCR, que analiza la presencia de material genético (ARN) del virus Sars-Cov-2 en el organismo.

Los casos activos de Covid-19 en la provincia se mantienen en los 4 relacionados con el brote de Beariz: tres permanecen aislados en sus domicilios, a seguimiento telemático durante la cuarentena. Una joven de 25 años, a la que se le detectó la enfermedad tras ingresar para ser operada por otra patología, sigue hospitalizada en el CHUO.

El Sergas suma a la estadística tres casos de personas diagnosticadas y ya curadas. El total de contagiados en Ourense desde el inicio de la pandemia es de 2.023, de los cuales 1.887 se cosideran curados, aunque la recuperación plena para muchos pacientes, sobre todos aquellos que estuvieron graves, lleva semanas e incluso meses. La cifra de víctimas según la estadística oficial -132 personas- no ha aumentado desde el 4 de junio.

Más de 800 PCR en un día

Entre el parte del Sergas del martes y el que ofreció ayer, el total de pruebas PCR efectuadas por el sistema sanitario en la provincia de Ourense subió de 32.226 a 33.070, lo que representa un nivel de rastreo de más de 800 en una jornada.

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